Luis Casals, CEO de Minura Hotels | MANOLO BARRO

Luis Casals, CEO de Minura Hotels, se ciñe a afirmar como CEO que el balance de la temporada es positivo. «Haber llegado a la normalidad comparativa a la temporada 2019 en cuanto a número de estancias de refiere, por lo tanto, hemos vuelto a la consolidación conseguida antes de la pandemia», confiesa.

Haciendo referencia al concepto de masificación, el CEO de la compañía defiende que en Menorca no existe, aunque «la falta de infraestructuras, la escasa política de mantenimiento de nuestras depuradoras, el no contribuir con el impuesto turístico a cubrir la huella turística con la modernización de las urbanizaciones, el modelo turístico de los últimos ocho años..., todo ello hace que en ciertos puntos de la isla en momentos determinados de la temporada haya habido congestión de visitantes y hace que aparezca la palabra masificación». Sin embargo, Casals dice que la masificación no es el gran problema del turismo, sino el aumento de estancias ilegales. «Soy muy defensor de todas las clases de alojamiento turísticos, desde el alojamiento de hotel al camping, pero siempre con las normativas vigentes, es decir, legalizados, la proliferación de estancias ilegales y alegales hacen una distorsión enorme que ocasiona verdaderos problemas».

Otros de los problemas que plantea Casals es que a pesar de que el Govern ha anunciado que levantará la actual moratoria de plazas, en Menorca «el sector hotelero ya tenemos un crecimiento capado desde el plan territorial insular del 2003, de 6.000 plazas, de las cuales solo hemos utilizado, en 20 años, 4.800. Siempre he solicitado a la administración que averigüe y confirme cuál es la masa crítica real que puede soportar Menorca, y cuando tengamos esta información clara y precisa se podrá tomar una decisión en firme de si hay que limitar las plazas turísticas actuales o no», añade y también admite que si tuvieran las infraestructuras y el transporte «que nos merecemos, no importaría quizás tener esta cantidad de flota de coches de alquiler, pero con la normalización de las estancias hoteleras, «se ha disminuido el alquiler de vehículos», argumenta.