Grupos de manifestantes y efectivos de las fuerzas de seguridad se enfrentan en la capital iraní en contra del Gobierno y en apoyo a Túnez y Egipto. | STR

El Ministerio de Asuntos Exteriores convocó ayer al embajador iraní en España, Morteza Saffari Natanzi, tras la detención por parte de la policía iraní durante cuatro horas y media del consejero encargado de Asuntos Consulares de la Embajada española en Teherán, Ignacio Pérez Cambra.

Según fuentes diplomáticas, Pérez Cambra fue arrestado por seis hombres de paisano a las puertas de la legación diplomática española en la capital iraní, que ayer fue escenario de manifestaciones de la oposición que habían sido prohibidas por el régimen.

Los opositores iraníes volvieron a salir ayer a las calles del país tras meses de silencio, pese al férreo dispositivo policial y la advertencia de las autoridades de que la movilización no había sido autorizada.

Protestas

Los manifestantes fueron convocados por los dos candidatos que fueron derrotados en los polémicos comicios presidenciales de junio de 2009, en los que resultó reelegido el presidente, Mahmud Ahmadineyad, y cuyo resultado la oposición reformista calificó de fraudulento.

Según testigos, durante la marcha se gritaron consignas en contra del Gobierno y a favor de los alzamientos pro democráticos en Egipto y Túnez.

La oposición, por su parte, indicó que una persona murió, varias fueron heridas y decenas detenidas, y que las fuerzas de Seguridad emplearon gases lacrimógenos y otros efectivos para evitar que los manifestantes se congregaran en la emblemática avenida Enguelab.

La secretaria de Estado de Estados Unidos, Hillary Clinton, manifestó ayer, «clara y directamente», el respaldo de Washington a los manifestantes opositores que salieron a las calles de Irán y exigió al Gobierno iraní que garantice a sus ciudadanos las mismas libertades de las que ya gozan los egipcios.