Mientras a su alrededor las cosas se mueven, la vida de los ciudadanos rusos transcurre con una cierta normalidad. En la imagen moscovitas caminan con el Kremlin de fondo. | Reuters

La región separatista con respecto a Georgia de Osetia del Sur, cuya independencia fue reconocida por el Kremlin en 2008, convocó para el 17 de julio un referéndum de integración con la Federación Rusa, según informa Efe. «¿Apoya usted la unificación entre Osetia del Sur y Rusia?», será la pregunta que deberán responder los surosetas, según el decreto firmado hoy por el presidente saliente, Anatoli Bibílov. Bibílov confirmó en su canal de Telegram que la Comisión Electoral Central de la república caucasiana aprobó «unánimemente» la adhesión a Rusia. «Los documentos han sido remitidos al Tribunal (Supremo). Esperamos la decisión del tribunal y muy pronto podremos cumplir nuestro gran sueño», dijo. Explicó que la convocatoria responde a la «aspiración histórica del pueblo de la república de Osetia del Sur de reincorporarse a Rusia».

«No es sólo una asociación o amistad. Es una relación de confianza entre hermanos, donde el hermano mayor siempre entiende y apoya al menor de palabra y de hechos, y el menor siempre respeta y ayuda al mayor. Es hora de unirse», subrayó. Recientemente, Bibílov adelantó a Efe que Osetia del Sur se proponía convocar un referéndum de integración, ya que «Rusia es la patria histórica de los osetas». «El referéndum no será una complicación, ya que mostrará al mundo que estamos con Rusia. Más aún ahora, cuando muchos países, incluido grandes potencias, le dan la espalda», explicó.

Esta semana el nuevo líder suroseta, Alán Gaglóyev, que derrotó a Bibílov en las elecciones presidenciales, anunció que coordinaría con el Kremlin la convocatoria de un referéndum. «Tan pronto como recibamos la señal, tan pronto como entendamos que llegó la hora, ese referéndum se celebrará con seguridad. Entendemos perfectamente que en esta situación no todo depende de Osetia del Sur. En tales asuntos hay que consensuar cada uno de los pasos», dijo Gaglóyev a la agencia rusa TASS. Llamó a hacerse cargo de la difícil posición en la que se encuentra «el aliado estratégico, Rusia», que «conduce una operación especial en Ucrania para la eliminación de las formaciones neonazis», precisó.

Osetia del Sur, cuya independencia fue reconocida por el Kremlin en agosto de 2008 tras una guerra con Georgia, ya dejó pasar una oportunidad cuando Rusia se anexionó la península ucraniana de Crimea (2014). Desde 2008 ese territorio es un protectorado ruso, donde Moscú cuenta con una base militar y cuyo presupuesto depende en un 90 % de las arcas del Estado ruso. Osetia del Sur, territorio donde habitan unas 50.000 personas, envió a varios cientos de voluntarios a combatir en las filas del Ejército ruso en Ucrania. Mientras Georgia ve ilegítimo el referéndum, el Kremlin ya ha dicho que respetará la voluntad del pueblo suroseta. Tras ingresar en la Federación Rusa, el próximo paso sería unirse a la república rusa de Osetia del Norte en un solo ente federado.