El presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, junto a la vicepresidenta segunda y ministra de Economía, Elena Salgado, durante la rueda de prensa conjunta que ofreció junto al primer ministro de Pakistán, Yusuf Razá Guilani, para analizar, entre otros asuntos, la situación económica internacional. | Juanjo Martín

El Gobierno ya ha decidido cuáles van a ser los ejes fundamentales del texto de la reforma laboral que aprobará el próximo 16 de junio «haya o no acuerdo» entre sindicatos y empresarios, según informaba ayer RNE. Uno de ellos pasa por flexibilizar el despido a cambio de penalizar la temporalidad.
Por ejemplo: si una empresa está en dificultades podrá acudir al recorte de plantilla y será considerado despido procedente, lo que implicaría una compensación de 20 días por año trabajado, frente a los 45 días de los despidos improcedentes.
El documento incluye el contrato con despido de 33 días, la limitación del contrato de obra a dos años, la adopción del modelo alemán de reducción de jornada y el modelo austriaco con un fondo del que saldría el pago de 8 días de indemnización por despido.
La secretaria de Organización del PSOE, Leire Pajín, aseguró que el Gobierno está estudiando extender la utilización del actual contrato que contempla los 33 días de indemnización por despido para fomentar la creación de empleo. «Se está hablando de analizar si realmente el coste del despido es uno de los elementos que está cuestionando o impidiendo que haya más contratos», afirmó. En este sentido, reconoció que el Gobierno estudia si se debe fomentar la utilización el contrato indefinido de fomento del empleo, ya existente, que contempla indemnizaciones de 33 días por año trabajado por despido improcedente.
Extensión
«Ese contrato ya existe, lo que hay que analizar es si es más útil para crear empleo en las circunstancias en las que estamos», apuntó Pajín, quien matizó que el Gobierno evitará «el impacto negativo sobre los trabajadores».
Este contrato con 33 días de indemnización se creó en 1997 y en la actualidad no se puede hacer a hombres de 30 a 45 años con menos de medio año en el paro. Si la reforma se hace por decreto se podrá hacer a este colectivo a partir de los 3 meses sin empleo.
La reforma laboral que ultima el Gobierno clarificará las razones por las que un despido puede ser procedente convirtiendo en ley algunas de las sentencias del Supremo sobre este materia. Según el esbozo adelantado, para que un despido sea procedente, al empresario le bastará con alegar una mala situación económica para prescindir de trabajadores de manera justificada.
Junto a estas medidas, el documento que prepara el Gobierno incluye medidas para penalizar la temporalidad en la contratación. De esta forma el contrato por obra sólo podrá ser de dos años y se aumentará la indemnización por despido en subcontratas para desincentivar su uso.