Las empresas con pérdidas durante seis meses podrán hacer despidos individuales o colectivos de manera procedente, con 20 días de indemnización, de acuerdo con una propuesta de la patronal que al Gobierno le parece bien y quiere negociar con los grupos parlamentarios, según fuentes del Ejecutivo. Tras la rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros que hoy abordó el documento de reforma laboral que será presentado a los agentes sociales, fuentes de Moncloa añadieron que «habrá que acotar las pérdidas, el tiempo de las mismas y el concepto».
En el borrador del decreto que el Gobierno remitió ayer por la esta tarde a los agentes sociales no se precisa ningún plazo de tiempo para las pérdidas por las que se puede justificar el despido, si bien señala que tienen que ser «no meramente coyunturales».
Durante la conferencia de prensa, el ministro de Trabajo, Celestino Corbacho, avanzó también que en el documento del Gobierno se incluye que los contratos por obra tengan un máximo de dos años ampliable a tres. Corbacho también explicó que el Gobierno ha optado por aplicar la «máxima extensión posible» del uso del contrato de fomento del empleo, porque dará «certeza al empresario» y «garantías al trabajador».
Mayor flexibilidad
Para el ministro, la reforma laboral que aprobará el Gobierno en cinco días se basará en dos objetivos: mejorar la flexibilidad laboral y acabar con la dualidad del mercado de trabajo. Rechazó la tesis de que flexibilidad sea lo mismo que precariedad, y aseguró que supone el paso necesario para «conseguir seguridad y mantener puestos de trabajo».
En este sentido confirmó que se implantará el modelo alemán para reducir la jornada laboral entre el 10% y el 70%, porcentaje «suficiente para ajustar por horas la producción de una empresa».
Además, el Gobierno quiere crear un fondo de capitalización de los trabajadores que imite el modelo austríaco y que debería estar operativo para todos los contratos indefinidos que se firmen a partir del 1 de enero de 2012. Según el borrador del decreto con la reforma laboral que el Gobierno ha remitido a los agentes sociales, las aportaciones al fondo, que hará el empresario por cada trabajador, se mantendrá durante toda la vida laboral de éste.