El paro en el entorno familiar es uno de los problemas que genera más patologías de salud mental y física. | Efe

El 44 por ciento de la población padece más estrés en su vida cotidiana que hace dos años por culpa de la actual crisis económica, que ha provocado un deterioro de la calidad de vida para muchos de ellos, según se desprende de los resultados de un estudio de la Fundación Pfizer.

Dicho informe, presentado en el VII Foro de Debate Social general, muestra también como para casi uno de cada tres ciudadanos (28%) la calidad de vida ha empeorado, sobre todo, debido a que los ingresos son menores o a que su salud se ha visto deteriorada.

Además, aunque para casi la mitad de los 1.200 encuestados (48,1%) la situación personal y familiar es igual que hace dos años, el 24,3 por ciento reconoce que es peor, identificando como los principales motivos de empeoramiento el haberse quedado en paro y que los ingresos personales actuales son menores.

El paro en la familia

Asimismo, la preocupación primordial en estos momentos es el trabajo (26,3%), seguido de la salud, el empleo de un familiar y la crisis económica en general.

Esto conlleva que hasta el 53,5 por ciento de los ciudadanos haya tenido que cambiar de costumbres o renunciar a algo recientemente a consecuencia de la actual crisis económica. De ellos, la mitad (53,7%) ha cambiado sus actividades relacionadas con el ocio y hasta uno de cada cuatro (24,2%) en los viajes. En cuanto a los hábitos alimentarios, el 74,6 por ciento opina que son los mismos, mientras que el 32,2 por ciento reconoce que ha tenido que modificar su cesta de la compra habitual debido a la crisis económica, sobre todo comprando más barato.

Respecto a la frecuencia de las prácticas de cuidado personal y del aspecto físico, el 41,9 por ciento de los encuestados que confirma una disminución lo achaca a motivos económicos, y el 26,4 por ciento a falta de tiempo.

Deterioro

La evolución de la atención médica es otra de las variables analizadas en esta investigación. «Para el 65,1 por ciento de la población este aspecto no se ha visto modificado y el 59,4 por ciento asegura que acude al médico con la misma frecuencia que estos años atrás», ha asegurado la presidenta de la Fundación Pfizer, Elvira Sanz Urgoiti.

Sin embargo, aunque para el 50 por ciento de los ciudadanos la atención sanitaria ha alcanzado un nivel bueno o muy bueno, al 70,1 por ciento le preocupa su posible deterioro a corto y medio plazo debido al actual contexto económico.