El ministro de Economía, Luis de Guindos, ha asegurado que, aunque España pida finalmente ayuda al fondo de rescate europeo, no habrá nuevos ajustes porque con los que el Gobierno ha aprobado «será suficiente» para cumplir con la reducción del déficit.

En una entrevista publicada ayer en el diario ABC, De Guindos también anuncia que el próximo 24 de agosto el Gobierno aprobará un decreto en el que se desarrollarán las líneas generales del conocido como «banco malo» para activos tóxicos, se introducirán cambios en el FROB y se abordará una reforma para evitar «abusos» como los relacionados con la comercialización de las preferentes.


A la espera

En cuanto a la ayuda que se puede reclamar a los fondos de rescate europeos –una puerta abierta por el presidente Mariano Rajoy el pasado viernes–, De Guindos admite que no sabe cómo se va a instrumentar todo este procedimiento.

Por eso España esperará a conocer los detalles y actuará «con prudencia» ante el ofrecimiento del presidente del Banco Central Europeo, Mario Draghi, de comprar deuda a los países en apuros si éstos piden la citada ayuda también para la compra de bonos soberanos.

El titular de Economía explica en este sentido que Draghi ha mandado «dos señales muy claras»; la primera que las diferencias en el coste de financiación entre los países del euro no son aceptables y segundo, que está decidido a intervenir en el mercado de deuda mediante fórmulas que se concretarán en próximas semanas.

«De lo que se trata ahora es de esperar a ver cómo se materializan estas fórmulas», añade De Guindos, para quien en todo caso «tenemos tiempo por delante».

A medida que se vayan conociendo los detalles se podrá tener un «calendario preciso», subraya el ministro, para quien el tesoro se está financiando «relativamente bien» en los mercados dadas las circunstancias y se muestra tranquilo porque el 70% de las necesidades de financiación para este año ya está cubierto.

Insiste en cualquier caso en que sea cual sea el proceso «la parte sustancial del ajuste» presupuestario en España está hecha y no hay nuevas medidas encima de la mesa porque con las aprobadas será suficiente para cumplir con el déficit comprometido con Bruselas.

«Nosotros cumplimos con nuestra parte y nadie duda de que lo vamos a seguir haciendo; que este compromiso haya que ponerlo o no en un papel no es lo importante», añade el ministro, para quien lo relevante es que los socios europeos no duden de España. Y en este sentido España ha dado, en su opinión «sobradas muestras de que merece esa confianza».

En la entrevista Luis de Guindos dice tener la percepción de que Alemania confía en España porque es la conclusión que saca cuando habla con el ministro de Finanzas de ese país, Wolfang Schaüble, que valora los esfuerzos que está haciendo la sociedad para superar los problemas actuales. El ministro tiene claro en todo caso que «la solución» a los problemas españoles «es europea».