Eduardo Madina, antes de asistir a la reunión de la Ejecutiva Federal del PSOE. | Fernando Alvarado

La dirección del PSOE volvió ayer a aplacar el debate interno sobre las primarias, una vez que los posibles candidatos Eduardo Madina y Patxi López han asegurado públicamente que no están en eso, y presentó su propuesta de reforma territorial, que incluye suprimir el Senado.

«Cuando lleguen las primarias todo se verá», afirmó Madina a su llegada a la sede del partido en la madrileña calle Ferraz, después de que algunos medios aseguraran en los últimos días que está «pensando» en presentar su candidatura.

El otro supuesto aspirante y secretario general de los socialistas vascos, Patxi López, rehusó hacer declaraciones: «Ya he dicho todo lo que tenía que decir», zanjó.

Patxi López, que en las últimas semanas se habría reunido con representantes de diferentes federaciones para recabar apoyos, dijo hace unos días que el PSOE debe abandonar las «intrigas palaciegas» y que él no es el «candidato de nadie porque no hay candidaturas a nada».

Valenciano

La escenificación de la postura «anticonspiratoria» de los dos protagonistas permitió a la vicesecretaria general del PSOE, Elena Valenciano, negar después que exista debate sobre primarias y «mucho menos» sobre la sucesión de Rubalcaba como líder.

Valenciano advirtió además que es un «error» impulsar ahora ese debate e insistió en que «hay que estar tranquilos porque todo tiene sus tiempos». Argumentó que ni el PP ni empresas como Coca Cola o El Corte Inglés «destapan sus estrategias en público años antes de que vayan a celebrarse las cosas». «No le voy a contar cómo voy a diseñar mi estrategia electoral», agregó.

Junto a ella compareció el parlamentario Ramón Jáuregui, que desde hace tres meses coordina el borrador de reforma territorial al que la Ejecutiva dio ayer el visto bueno tras realizar varias modificaciones.

El documento incluye suprimir el Senado y sustituirlo por una cámara de representantes elegidos por los gobiernos o los parlamentos autonómicos.

La Cámara de Representación Territorial tendría limitadas sus funciones sólo a las leyes de contenido autonómico e incorporaría la Conferencia de Presidentes, las conferencias sectoriales y el Consejo de Política Fiscal y Financiera (CPFF).