Vicente Martínez-Pujalte reconoce que la venta del Banco de Valencia «ha costado dinero al contribuyente». | Reuters

El PP da por hecho que el Estado no podrá recuperar íntegramente los 40.000 millones de euros de fondos públicos que se inyectaron el año pasado en el sector bancario, y aboga por que a partir de ahora se trabaje para conseguir que las pérdidas que soporten los contribuyentes sean «las menores posibles».

El portavoz económico de los ‘populares’ en el Congreso, Vicente Martínez-Pujalte, ha explicado que ya existe una entidad, el Banco de Valencia, cuya venta «ha costado dinero al contribuyente», situación de la que responsabiliza directamente al comisario europeo de Competencia, Joaquín Almunia, que «exigía» la liquidación de la entidad, lo que forzó al Gobierno a llevar a cabo «una subasta rápida que costó dinero al contribuyente».

«La liquidación hubiera costado aún más. Pero es que si no lo perdía el contribuyente lo perdían los depósitos, y eso hubiera producido un contagio en la confianza de los ciudadanos en los depósitos bancarios que hubiera sido todavía más perjudicial. Se tomó una medida que no es buena, pero que es la mejor de las malas», añade el diputado.

Menos pérdidas

Por eso, ante la reactivación de los procesos de subasta en Novogalicia Banco y Catalunya Banc por parte del Fondo de Reestructuración Ordenada Bancaria (FROB), Martínez-Pujalte defiende que es necesario «intentar poner en valor las entidades para que, cuando vuelvan otra vez a la economía privada sea con la menor pérdida posible».

«El Gobierno lo que quiere es que el contribuyente recupere la mayor parte del dinero que ha puesto», insiste, defendiendo que la tercera entidad nacionalizada, Bankia, se está «gestionando de la manera adecuada» para conseguir recuperar el valor de la marca comercial y ajustar los gastos a sus beneficios, de cara a su enajenación futura sin necesidad de nuevas aportaciones públicas y sin pérdida de lo ya inyectado.