Los osos que habitan en bosques próximos a núcleos urbanos se dejan ver a veces por las calles como si nada. Suelen moverse por sitios en los que se acumulen restos de basura en los que puedan rebuscar algún resto de comida para alimentarse.

Este caso en concreto, ha causado sensación entre los vecinos de Connecticut, en Estados Unidos, después de que las cámaras de seguridad de una casa captasen el allanamiento de un oso que, tranquilamente se lleva una lasaña del congelador. Así es, el oso se pasea por la casa hasta llegar a la cocina donde se topa con la nevera. Entonces abre suavemente el cajón del congelador y agarra con el hocico un envoltorio de lasaña. Con el congelador abierto, el animal apoya una de sus patas traseras sobre el cajón para poder salir cómodamente por la ventana de la cocina que se encontraba abierta. Las cámaras exteriores captaron la salida de este «ladrón» que se dirige con su botín hacia el bosque.