Ese periodo de tiempo en el que el cachorro o adulto de la casa debe ser educado en las normas del hogar es bastante difícil. Ha quedado demostrado una vez en una publicación recogida por la cuenta de Instagram Pubity en el que una pequeña de unos cuatro años muestra su perfil de futura adiestradora canina después de que ‘Dobby’, el Golden Retriever de la familia, haya orinado en el sofá.

Ver esta publicación en Instagram

Una publicación compartida de Pubity (@pubity)

Visiblemente indignada, la pequeña no duda en recriminar a su perro una mancha bastante sospechosa en el centro del sofá.

El perro a sabiendas de su reprochable conducta se queda quieto estoicamente recibiendo su reprimenda con una gran paciencia. «Eso no se hace. Díselo», anima su padre desde el fondo. «Pipí en la calle», agrega. Entonces, la niña, intenta enseñar a Dobby la lección, aunque debido a su edad no es del todo clara.

Dobby opta por tumbarse como símbolo de haber perdido la batalla que acaba con la niña acariciándolo y ofreciéndole un juguete.