Se desata el caos en un avión con destino tras descubrir una serpiente viva en la cabina superior

AirAsia Tailandia, que ya en febrero de 2022 reportó una situación similar, vuelve a poner la seguridad aérea en el punto de mira por el mencionado vuelo FD3015, que salió del Aeropuerto Internacional Don Mueang el pasado 13 de enero, según anunció la compañía en un comunicado enviado a CNN.

"Se avisó a los auxiliares de vuelo antes de aterrizar en Phuket después de que un pasajero observara una pequeña serpiente en la cabina superior del equipaje", explicó Phol Poompuang, jefe de seguridad corporativa de AirAsia Tailandia, a través del comunicado, reiterando que este reciente avistamiento de serpientes se trata de "un incidente muy raro".

Aun así, aseguró que la tripulación "estaba bien entrenada" para gestionar un suceso de este calibre. De hecho, tras reubicar a los pasajeros de la zona "como medida de precaución", la aeronave aterrizó sin problemas. Posteriormente, con base al "procedimiento estándar", "fue sometido a una limpieza profunda y fumigación antes de reanudar las operaciones".

Por el momento, se desconoce de qué tipo de serpiente se trata, si bien la compañía sostiene que "la seguridad y el bienestar de los huéspedes o la tripulación" nunca estuvo "en riesgo". Sin embargo, en un vídeo viral de TikTok que, supuestamente, se grabó durante el suceso, se puede ver cómo uno de los auxiliares trató de capturar al pequeño reptil, botella de plástico en mano. Al no conseguir introducirla en el recipiente, optó por meterlo dentro de una bolsa de plástico.

Del mismo modo, numerosos vídeos y fotos se viralizaron a través de redes sociales cuando, en febrero de 2022, hallaron una pitón a bordo de uno de los vuelos nacionales de AirAsia en Malasia, que partió de la capital, Kuala Lumpur, rumbo a Sabah.

El animal, al que se le pudo ver reptando por las luminarias del avión, provocó el desvío del trayecto de la aeronave, que terminó aterrizando en el aeropuerto internacional de Kuching, en el estado de Sarawak. "Se trata de un incidente muy raro que puede ocurrir en cualquier avión de vez en cuando", se justificó por entonces la aerolínea a través de un comunicado.