La llegada del buen tiempo parece invitar a poner a punto el hogar y, en ese proceso, no hay que olvidarse del que es uno de los electrodomésticos al que más uso se da: la lavadora. En contra de lo que se puede llegar a creer, el aparato que se utiliza para lavar la ropa, también se ensucia. De ahí que, para conservarlo en buen estado el máximo tiempo posible, hay que limpiarlo a fondo, como mínimo, cada seis meses: sin olvidarse del tambor, la goma y el filtro. Solo así las prendas saldrán perfectas y sin olores y, de esta forma, se conseguirá ahorrar dinero en averías.

Puesto que la lavadora permanece húmeda durante mucho tiempo, las bacterias y los gérmenes pueden llegar a acumularse, lo que convierte al aparato en un foco de mal olor, moho y otras suciedades. Pero esto no resulta extraño si se tiene en cuenta que se carga con prendas con malos olores o manchadas.

Por ello, se aconseja seguir los trucos que se dan a continuación para limpiar a fondo la lavadora y dejarla impecable en poco tiempo, tanto con productos industriales, como naturales.

Pasos para limpiar el tambor de la lavadora

Lo primero que hay que limpiar es el tambor de la lavadora y, para ello, hay que hacerse con lejía, agua caliente y vinagre blanco, que es un limpiador excelente, capaz de eliminar los malos olores y las bacterias. Consiste en añadir media taza de este producto en el dispensador del detergente y, a continuación, escoger un ciclo de lavado normal con una temperatura de 30 o más grados.

Si, una vez hecho esto, la lavadora no está lo suficientemente limpia, se puede repetir el proceso, añadiendo una taza de lejía que se usa para lavar la ropa. Además, si se quiere profundizar aún más, se puede utilizar el vinagre para desincrustar la cal que se podría haber generado: cuando haya mucha cantidad, se recomienda recurrir a un producto específico.

Por último, tras limpiar el tambor, hay que poner un ciclo en vacío o con toallas viejas para acabar de enjuagar bien.

Pasos para limpiar la goma y el filtro de la lavadora

Si hay un lugar en el que se acumula más suciedad, es la goma de la lavadora. Esta debe limpiarse, al menos, una vez al mes, para evitar que los restos se incrusten y sean todavía más difíciles de quitar.

Así, el primer paso es comprobar que no ha quedado ningún elemento atrapado en el interior de la goma de la lavadora. Después, se pasa un trapo húmedo para quitar la mayor cantidad posible de suciedad, y se opta por un blanqueador casero: se moja un trapo y se pasa por el interior, o se introduce en un pulverizador y se rocía la zona hasta que esté empapado.

Tras dejarlo actuar unos minutos, se frota con un paño o una esponja para arrancar toda la suciedad, se pasa un trapo mojado para aclarar el producto y, luego, uno seco para que no quede rastro de humedad.

Pero, antes de terminar, hay que asegurarse de que no se ha acumulado suciedad en el filtro. También hay que limpiar los dispensadores de jabón y de suavizante cada seis meses, aproximadamente.

Cómo acabar con los malos olores de la lavadora

Cuando la lavadora desprende malos olores, todo apunta a que está infectada de bacterias que provocan el moho, ya sea por falta de ventilación o poca limpieza o mantenimiento. Así, para acabar con este problema, se puede seguir el siguiente método:

  • Programar un ciclo corto de agua caliente y aplicar medio litro de vinagre blanco, o la botella completa en casos extremos.
  • Al acabar el ciclo, se abren las puertas de la lavadora y se dejan así el resto del día para que se ventile el interior.
  • Quienes lo deseen pueden, además, colocar un bol con bicarbonato de sodio en el tambor y dejarlo reposar allí toda la noche. El bicarbonato es ideal para absorber los malos olores de forma efectiva.