Ex ministro de Industria, el socialista Miguel Sebastián, lamentó ayer que Pedro Sánchez hubiera apostado por una intervención light y duradera en lugar de una contundente y corta, opción por la que suspiraba, para doblegar la curva. Y es que la efectividad del toque de queda de 23 a 6 horas que ha llegado junto a una nueva declaración de estado de alarma presenta numerosas dudas sobre su efectividad, especialmente en territorios como Baleares que merecen una profunda reflexión. ¿De qué sirven los esfuerzos de los ciudadanos y de los empresarios, si personas contagiadas pueden entrar sin ningún tipo de control como pasó este verano?

Armengol parece que ha aprendido la lección.
De la intervención de ayer ante la prensa y del contenido de la reunión con los presidentes de los consells, se deduce que Francina Armengol ha aprendido la lección después de vetar la cuarentena para viajeros procedentes de zonas con elevadas tasas de transmisión este verano, la razón por la que se reintrodujo el virus en las islas, tal como confesó en Periódico de Ibiza y Formentera Javier Arranz. No tiene sentido que la sociedad haga un esfuerzo titánico de nuevo y que no haya controles en los aeropuertos o incluso el cierre de los mismos, salvo para casos justificados como durante el primer estado de alarma de la crisis. El Govern anunciará esta semana qué decisión toma al respecto. Para ser un destino seguro, no solo no ha de haber virus, tampoco ha de poder entrar.

PCR y/o test de antígeno para entrar.
Lamentablemente los test de antígenos nos son todo lo fiables que necesitamos para detectar a asintomáticos, pero son mejores que nada, ya que algunos sí son detectados y también identifica a personas contagiadas. Mientras no haya un sistema mejor, es preferible un control de este tipo que ningún tipo de control. Con la capacidad sanitaria actual y el escaso volumen de pasajeros actual, también procede plantearse la oportunidad de hacer PCR para entrar en las islas o bien entrar con una hecha un máximo de 48 horas antes. Todo esfuerzo es poco y al mismo tiempo bienvenido para revertir la situación actual cuanto antes.