Las fechas del debate de investidura, 26 y 27 de septiembre, marcan el tiempo de los dos escenarios que se abren ahora: la formación de un gobierno antes del 27 de noviembre o la repetición electoral el 14 de enero. El reloj empieza a correr a partir de la primera votación a la candidatura a la presidencia del Gobierno del líder del PP, Alberto Núñez Feijóo, o sea, el 27 de septiembre, cuando arranca un plazo de dos meses para que el Congreso de los Diputados otorgue su confianza al nuevo jefe del Ejecutivo. Si ningún candidato es elegido, el Rey disolverá las Cortes y convocará nuevas elecciones, que deben celebrarse en un plazo de 47 días, el 14 de enero.

Investidura fallida

En estos momentos, Feijóo encara una investidura fallida al contar solo con 172 apoyos: los 137 diputados del PP, los 33 de Vox y los dos parlamentarios de UPN y Coalición Canaria. Le hacen falta cuatro votos más a favor, que podrían venir de los 5 que tiene el PNV, o la abstención de Junts, una vía que hoy no existe. Si el 27 de septiembre no alcanza la mayoría absoluta, Feijóo tendrá que ir a una segunda en el plazo de 48 horas, en la que le valdría con mayoría simple: más síes que noes. Si sale elegido, habrá nuevo gobierno, pero de no contar con el apoyo de la Cámara se abre otro escenario.

Acabar con la incertidumbre

El Rey convocaría una nueva ronda de consultas para nombrar a otro aspirante a La Moncloa. El presidente del Gobierno en funciones y secretario general del PSOE, Pedro Sánchez, sería este segundo candidato al contar con 152 apoyos: los 121 escaños del Partido Socialista y los 31 de Sumar, con quien pretende gobernar en coalición. Le falta cerrar acuerdos con ERC (7), EH Bildu (6), BNG (1), PNV (5) y el que se presenta como más complicado, JxCat, con siete diputados. Es preciso acabar, cuanto antes, con esta situación de incertidumbre. Hay demasiadas cosas en juego: desde la estabilidad política a los Presupuestos del Estado del 2024.