Pueden insistir todo lo que quieran en que, gracias a la convalidación del decreto anticrisis por el Congreso de los Diputados por 172 votos a favor y 171 en contra, el transporte público seguirá siendo gratuito, pero no es verdad. Nada es gratis y esto tampoco. No cobrar a quienes tienen recursos económicos suficientes para costear algo que cuesta dinero, supone un fraude, una estafa que nada tiene que ver con políticas progresistas, sino más bien con un engaño. Un robo, diría yo. Un año más, quienes no usan el transporte público pagarán el servicio como si lo usaran. Y quienes lo usan, no pagarán nada. Nada de nada, independientemente de si tienen dinero o no lo tienen. Da igual si son jubilados con una pensión no contributiva (unos 800 euros al mes) o si son desempleados de larga duración. A estos efectos, se les equipara con aquellos pensionistas que perciben la pensión máxima para 2024, fijada en 3.175 euros mensuales. Todo es realmente progresista. El hecho de no pagar algo que cuesta dinero tiene otro efecto muy pernicioso.
Opinión
¿Gratis de qué?
También en Opinión
- Govern y sindicatos acuerdan que las auxiliares de enfermería cobren un plus de 196 euros al mes
- Tres detenidos por blanquear 680.000 euros del narcotráfico con una empresa de reparación de embarcaciones
- Descubre cómo era Ibiza entre 1950 y 1980 a través de la mirada de Oriol Maspons
- Multazo de casi 300.000 euros por construir dos casas de madera en pleno parque natural de Ibiza
- «Soy de Ibiza, tengo trabajo y duermo en el coche por el precio de los alquileres»
Sin comentarios
Para comentar es necesario estar registrado en Periódico de Ibiza y Formentera
De momento no hay comentarios.