2020 cambalache, problemático y febril, el que no llora no mama, y el que no afana es un gil ¡Dale, no más! ¡Dale, que va!» ... 84 años después de su composición el tango creado por Enrique Santos Discépolo sigue vigente al igual que sucede con muchas de las historias contadas y avanzadas por el maestro Luis García Berlanga. «Que el mundo fue y será una porquería, ya lo sé en el quinientos seis y en el dos mil, también...» 30 hojas del calendario nos quedan para dar puerta a este infausto 2020. La tierra seguirá orbitando y el planeta fútbol seguirá rodando. Puede ser que el fútbol sea menos fútbol sin los comentarios y las anécdotas de Michael Robinson. El fútbol será menos tras la marcha del Diego, pero la pelota seguirá rodando y dejando momentos estelares como el gol dibujado por Messi el domingo ante el Osasuna, el equipo de Sir Robinson. Una acción superpuesta a otra similar ejecutada por Maradona el 7 de octubre del 93. El Lio niño estaba aquel día en la tribuna de Newell’s. El domingo, Messi remató la obra de arte con la camiseta que el 10 lucía aquella noche de 1993.

La pelota seguirá rodando y en el fútbol más terrenal el esférico rueda más que nunca para la UD Ibiza. Seis de seis para un equipo que ansía el ascenso a la División de Plata del fútbol español, una meta todavía lejana, pero que se vislumbra más cerca por la consistencia que muestra el proyecto. Ante el Hércules, gol in extremis para rubricar un arranque de temporada espectacular e inmaculado.

Y más terrenal pero no menos gesta la que está escribiendo la Penya Esportiva Sant Jordi. En su estreno en Tercera, los de David Escandell firman por victoria todos los partidos disputados en el Kiko Serra, el toque celestial del club verdinegro.