La Cruz Roja, al lado de las personas mayores

Aprovechando que este próximo domingo día 1 de octubre se celebra el Día de la Personas Mayores, este viernes la Cruz roja ha querido comenzar en su carpa del Parque de la Paz las celebraciones que continuarán el domingo en Vara de Rey.

‘Cuando seas mayor’

La actividad de este viernes ha ido dirigida no solo a las personas mayores sino al público joven, a quienes se ha pretendido concienciar de que algún día llegarán a ser mayores bajo el slogan ¿Te has preguntado cómo vas a ser cuando seas mayor?.

Bajo un decorado con fotografías de jóvenes voluntarios de Cruz Roja retocadas con inteligencia artificial para que sus rostros parecieran ancianos, las voluntarias animaron a guardar en una cajita un mensaje con un solo recuerdo que conservar en el futuro, concienciando así a los participantes de los estragos de enfermedades relacionadas con el envejecimiento como el alzhéimer. Para guardar también en el recuerdo, Cruz Roja colocó también un photocall en el que poder fotografiarse con un cuerpo anciano.

Celebraciones aparte, cada viernes se puede encontrar la carpa de la Cruz Roja en el Parque de la Paz, «un punto seguro», tal como lo define Laura Moreno, jefa del departamento de Intervención, quien afirma que en este puesto «ofrecemos cualquier tipo de ayuda a las personas mayores que nos la piden». «Desde charlar con ellos un rato, a solucionarles un problema con el móvil o acompañarles al banco», explica Moreno.

Punto seguro

«La actividad Punto Seguro está englobada dentro del proyecto Fem-ho Possible», matizaba Mari Castaño, coordinadora en Ibiza de Cruz Roja. Un proyecto que «tiene tres ramas», tal como explica Marta Tur, técnica y psicóloga de la entidad, que describe que, «por un lado está la parte los centros escolares, a los que visitamos para hacer dinámicas sobre el trato a las personas mayores».

«Trabajamos mucho los conceptos, como por ejemplo, el de qué es ser viejo en contraposición a qué es ser mayor», apunta Moreno. «Por otro lado, también está la tercera rama que desarrollamos en los pequeños comercios a los que suelen ir las personas mayores», añade Tur, quien explica que, de esta manera, «implicamos a los empleados de estos comercios en el sentido de que si detectan que sus clientes necesitan alguna cosa, nos pueden avisar para que les ayudemos». «Es una manera de crear una red en la sociedad para en torno a la sensibilidad y el buen trato a nuestros mayores», concluye la psicóloga.