En la cueva se encontraron cerca de 600 figuritas completas y más de un millar de cabecitas. | Irene Arango

El antiguo director del Museo Arqueológico de Ibiza y Formentera (MAEF), Jordi H. Fernández, ha iniciado este lunes el ciclo de conferencias sobre el santuario de es Culleram y el descubrimiento de la placa de bronce con inscripciones, del que ahora se cumple su centenaria. La de este lunes ha sido una charla introductoria de las tres próximas en la que explicó qué trabajos e investigaciones se han realizado en el yacimiento de es Culleram, situado en Sant Vicent de sa Cala, en las distintas épocas, así como las vueltas que dio la placa desde que se encontró.

Las primeras excavaciones arqueológicas datan de 1907. La segunda vez, en el año 1914, fue Carlos Román quien se adentró en la cueva, mientras que en los años 1965 y 1968 realizó excavaciones el Barón de Esponellá. Ya en 1981 fue Joan Ramón Torres.

En la charla titulada ‘Excavaciones en el santuario de Es Culleram y el viaje de Ibiza a Alicante de la placa de bronce con inscripciones’, Fernández hizo un repaso general de estas intervenciones al yacimiento arqueológico de las que también se presentaron algunos de los materiales que han ido apareciendo en las excavaciones, principalmente terracotas. En la primera excavación se encontraron cerca de 600 figuritas completas de tipo acampanado y más de un millar de cabecitas tipo estatuillas de unos 15 centímetros, explicó. Muchos materiales aparecieron principalmente en la primera campaña de 1907 que se realizó en el interior. A partir de esa fecha «casi todas las excavaciones se realizaron en el exterior», debido al riesgo de derrumbe que tenía la cueva, y ya fuera la gran mayoría del material encontrado fue «muchísimos fragmentos cerámicos principalmente de terracota», aseguró Fernández.

Al ser preguntado por los objetos encontrados, Fernández apuntó que «la gran mayoría de los materiales extraídos en todas estas campañas de excavación han ido a parar a los fondos del MAEF», donde hoy en día se conservan. Aunque otros muchos fueron vendidos por los excavadores de aquella época, ya que en ese momento se permitía que el que financiaba la intervención pudiera quedarse con parte de ellos, algo que en la actualidad está prohibido.

Así, el financiador de la primera campaña de 1907 se quedó con los materiales, pero cinco años después hizo entrega de un «importante lote de materiales» al museo. Posteriormente, en 1966 hubo una donación también «importante», que es la colección Sáinz de la Cuesta, propiedad de un banquero que vivía en Santa Eulària que compró la colección a la familia Román, quien había dirigido la excavación en 1914.

Estos hallazgos datan en su mayoría de los siglos III y II a.C., en la época púnica, incluso quedan algunos materiales de la época prehistórica, que fueron realizados a mano en el 1800 a.C., aproximadamente.

La plaquita de Es Culleram

La segunda parte de la charla la protagonizó la historia de la placa de es Culleram, que fue hallada por un payés hace justo 100 años, quien la conservó un tiempo hasta que en el año 1929 se la muestra a un señor que resulta ser inspector de enseñanza y secretario de la Comisión de Monumentos de Alicante. Este la compra y se la lleva a Alicante, donde se conserva hasta la actualidad. Este inspector era una persona muy conocida en el mundo de la arqueología y colaboraba con personas muy importantes, explicó Fernández.

Esta placa de bronce tiene inscripciones que «corresponden posiblemente a finales del siglo II a.C. en una cara, y al III y IV a.C. en la otra cara» y se encuentra temporalmente en Ibiza para conmemorar el centenario de su hallazgo con la exposición ‘Per a la nostra senyora Tinnit, la Poderosa. La plaqueta des Culleram, cent anys després’.

El resto de conferencias tendrán lugar los días 21, 22 y 23 de noviembre con un aforo máximo de 88 personas en el Museo Monográfico de Puig des Molins.