Las estudiantes del ciclo de Peluquería del IES Algarb han regresado este jueves al hospital Can Misses para ofrecer una sesión de peluquería a los pacientes de larga estancia. Es una iniciativa que se repite por segundo año y viene de mano de la Asociación Nunca Solos.

Ya en la cuarentena se puso sobre la mesa la importancia del cuidado corporal en aras de la salud mental y de eso trata la actividad en el hospital para aquellos pacientes que pasan mucho tiempo entre camillas, uniformes médicos y con preocupaciones de salud que terminan ocupando un primer y único plano. Además, en la mayoría de los casos son mayores y para ellos supone una distracción, al ser algo tan diferente de lo que están acostumbrados a hacer.

Cinco alumnas y dos profesoras se repartieron entre ocho pacientes a quienes dejaron muy satisfechos. Como el caso de José Marí, quien lleva una semana hospitalizado y entre risas aseguraba lo «están dejando de maravilla», incluso piensa que cuando sus familiares le vean se preguntarán «¿y este tío quién es? me lo han cambiado», afirmó entre risas.

Según otro paciente llamado José María, muy querido por los sanitarios, comentó que estaba «como en cualquier otro sitio», aunque admitió que no se cortaba el pelo hace «por lo menos tres meses». Jose María no puede mirar el resultado ya que hace un tiempo perdió la vista, pero el equipo de Nunca Solos le ha hecho saber lo bien que le quedó, pues nada más terminar se fue de paseo por el pasillo a lucirse con una de las voluntarias para luego reencontrarse con el resto, escuchar los halagos y contarles la experiencia. Lo curioso es que por los olores este señor reconoce a todos los voluntarios que le acompañan cada semana.

La presidenta de la asociación, Rosario De las Heras, aseguró que «no ha costado nada convencer a las alumnas» y ellas lo demostraron. La alumna que le cortaba el pelo a José María confesaba estar «un poco nerviosa pero bien». Para ella la experiencia fue la siguiente: «Es una sensación, la verdad, muy bonita y que me está gustando mucho esta actividad, compartirla con mis compañeras y poder ayudar a la gente».

La asociación sin ánimo de lucro Nunca Solos actúa en las salas de Medicina Interna F, G y Traumatología ya que en esta planta los pacientes necesitan un acompañamiento prolongado por ser de larga estancia, incluso hay casos en los que llegan a cumplir más de un año de hospitalización mientras esperan residencia, según explicaron a este periódico. Rosario De las Heras es enfermera y presidenta de la Asociación Nunca Solos Voluntarios y explicó cuál es su misión: «Hacemos acompañamiento y entretenimiento a los pacientes que están ingresados, paseamos con ellos por el pasillo, a veces los bajamos para que les de el aire porque no tienen con quién bajar, nos sentamos con ellos en la cama…» .

Además, acondicionaron una sala para que puedan estar aquellos que son autónomos haciendo actividades como pintar mandalas, jugar al parchís o leer la prensa y pasar la tarde. Los voluntarios como cada año, también decoraron toda la planta con motivos de Navidad.

Es el segundo año que se celebra esta reunión en la que participan las alumnas del IES Algarb, «aportando su granito de arena y dando un poco de autoestima a los pacientes que están ingresados en las salas del hospital», como indicó Rosario.

La primera vez que se hizo fue una voluntaria, que también es peluquera, y se le ocurrió preguntar si podía cortarle el pelo a un señor que lo tenía muy largo y no tenía medios económicos. La presidenta cuenta: «Le cortamos el pelo y la barba y la imagen del señor era como que no se reconocía él en el espejo, la alegría de este hombre de verse, porque le cortaron el pelo en frente del espejo, fue la motivación para seguir haciéndolo».