El director insular de Cultura, Miquel Costa, junto con Guillermina Puget y Joan Albert Ribas, comisarios de la muestra, han presentado este miércoles la exposición que Sa Nostra Sala inaugura este jueves a las 20 horas y que podrá visitarse hasta mediados del próximo mes de febrero.

Se trata de una colección de 32 acuarelas de Narcís Puget Riquer (1916 - 1983), a quien Costa no duda en calificar como «el mejor acuarelista de Ibiza y uno de los mejores de España», que conmemoran el 40 aniversario de su muerte. «Una oportunidad única de poder admirar un espectáculo artístico excepcional a través de una técnica tan difícil como es la acuarela, a la que el autor calificaba como ‘la poesía de la pintura’», tal como explicó el director insular de Cultura.

La exposición conmemorativa de Puget hijo, presenta principalmente obras pertenecientes a la colección privada de familia Puget Reig, aunque una parte, hasta ocho, forman parte del Fondo Artístico del Consell Insular d’Eivissa. La muestra cuenta también con una colección de 17 fotografías captadas por el mismo Puget y otras siete instantáneas familiares en las que no falta una fotografía del autor con su madre, Guillermina Riquer, o un retrato de Puget padre realizado por su propio hijo.

Fotografía

Los comisarios de la muestra, Guillermina Puget y Joan Albert Ribas, destacaron que la selección fotográfica con la que concluye la exposición, compuesta por dieciséis de sus fotografías, tiene un significado especial. A diferencia de otros artistas, Narcís Puget Riquer no solía tomar varias fotos previas a una obra para prepararla, como lo hacía, por ejemplo, Vicent Ferrer Guasch (con quien compartía jornadas de trabajo artístico) y muchos otros. Para él, la fotografía se convirtió casi en lo opuesto. Y es que la fotografía fue la única forma en que pudo seguir cultivando su sensibilidad artística tras la enfermedad en la visión que le impidió seguir dedicándose a la pintura. Una colección de fotografías que, al igual que hiciera con sus geniales acuarelas, representan su testimonio de los paisajes ibicencos, jugando con contraluces, sombras y grandes encuadres que ya no pudo plasmar con pincel.

Tal como explicó Ribas, «a través de la exposición ‘Narcís Puget Riquer, el acuarelista de Ibiza’, se ha intentado trazar su trayectoria vital, desde Vila y sus alrededores hasta Santa Eulària des Riu y sus estancias en Formentera. También se pueden apreciar algunos retratos que realizó, incluyendo tres de su padre en los que se puede apreciar cierto acercamiento hacia la abstracción». El comisario también quiso poner en valor la relativamente corta trayectoria del artista como acuarelista que, «tuvo una duración de diez años antes de que perdiera la visión de un ojo» y que sin embargo, «dejó una obra completa y genialmente trabajada». «La acuarela es una técnica compleja que, como él mismo declaró en su momento, de la misma manera que el óleo permite rectificaciones, la acuarela hay que trabajarla al primer trazo», apuntó Ribas mientras señalaba que «se pueden observar los inicios más académicos para ver su evolución hacia pinceladas más largas, sueltas y libres».

Por su parte, Guillermina Puget, hija del artista y comisaria de la muestra, compartió su «reflexión personal» en torno a que «probablemente se dedicó a la acuarela por modestia y por respeto hacia su padre, por no ‘hacerle sombra’ usando la misma técnica que él». Puget también recordó la visita en 1933 a Ibiza de la Escuela de Cerámica de Madrid, «aquí se encontraron el talento de dos jóvenes artistas, Narcís Puget Riquer y ‘Gabrielet’, y se los acabaron llevando a estudiar a Madrid, donde forjaron su técnica con la acuarela a la vez que su amistad».

La exposición se inaugura este jueves 14 de diciembre a las 20 horas y estará abierta hasta el 16 de febrero de 2024, con horario de lunes a viernes de 10.00 h a 13.30 h y de 17.30 h a 20.30 h.