Genís Campillo se desnudó en el escenario para pedir la libertad de los políticos presos. | FORMENTERA AVUI

Las fiestas de Santa Maria en Formentera han vuelto a suscitar polémica un año más por diversas manifestaciones de corte independentista que se han producido en los actos programados durante los últimos días.

La lectura del pregón de las Festes de la Terra el pasado lunes en Sant Francesc volvió a hacer referencia a los políticos presos y atacó, entre otros, al juez Manuel Marchena o al presidente del Gobierno, Pedro Sánchez. «Para estos jueces, justicia y calabozo» o «Marchena, mejor afíliate a Vox, puede que allí encuentres un poco de amor», fueron algunas de las frases que el pregón, organizado por la Comissió de Festes de Santa María, lanzó al magistrado. Del presidente del Gobierno señalaron que «nos la ha vuelto a jugar» al hablar de «democracia mientras los Jordis todavía siguen encerrados, Valtonyc y Anna [Gabriel] siguen exiliados y al pueblo lo siguen desahuciando». Por su parte, el líder de Ciudadanos, Albert Rivera, tampoco escapó de las polémicas críticas al ser apodado «Primo de Rivera».

Sin embargo, éstas no fueron las únicas referencias a los líderes independentistas en el pregón. En el discurso también se subrayó que «mientras esta ‘colla’ está en la televisión [en referencia a los políticos de extrema derecha], políticos dignos siguen en la prisión, es terrible y todavía hay discusión», concluyendo la estrofa con un «tranquilos, la historia nos dará la razón».

Por otra parte, también ha sembrado disputa la actuación del grupo formenterer Allsex el pasado domingo, a partir del desnudo integral del líder de la formación, Genís Campillo, a modo de denuncia contra la situación de los políticos catalanes presos.
En este sentido, el músico declaró el pasado martes en Ràdio Illa que esta acción formaba parte de una performance con la que pretendía manifestar una serie de reivindicaciones de carácter personal.

De vuelta al pregón del lunes, este año también ha tenido un marcado carácter feminista y ecologista, mayoritariamente aplaudido por la opinión pública. No obstante, algo que también sumó polémica al asunto fueron algunas críticas a la saturación turística, sobre todo por frases como la sonada «guiris go home».

Reacciones políticas
Desde el grupo de la oposición en el Consell de Formentera, Sa Unió, declararon ayer que pese a respetar «cualquier forma de libertad de expresión», al mismo tiempo «dejamos claro que no compartimos muchas de las cosas que se dijeron o acciones que se realizaron». La coalición de PP y Compromís amb Formentera lamentó que el componente reivindicativo sobre la cultura, la lengua propia, las tradiciones, la conservación del medioambiente y el territorio de la isla «se haya convertido en una plataforma para la defensa de unas ideas políticas que son –destacaron- minoritarias en Formentera».