Puerto la Savina en Formentera.

Gent per Formentera ha asegurado en un comunicado que «según datos del propio Govern, en el informe de la Calidad del aire de las Islas Baleares 2018, la concentración de dióxido de nitrógeno en el puerto de la Savina en temporada baja es superior al máximo permitido». Algo que han calificado como «inaceptable en pleno Parque Natural» y a lo que han añadido «la salida de numerosas barcas a la misma hora implica un derroche irresponsable de combustible que sobrepasa los límites aceptables tanto a nivel de contaminación como por razones medioambientales».

Pronto hará un año que Gent per Formentera lamentaba públicamente que el Govern propusiera la aprobación del decreto de transporte marítimo. «La desidia y falta de compromiso con las necesidades de Formentera hacen que tengamos que seguir exigiendo la aprobación de un decreto vital para la conectividad, la competitividad y futuro como destino turístico, que debería haberse aprobado en 2011» señaló el equipo de Gobierno, exponiendo que esta regulación, «estableciendo unos mínimos para la conectividad y unos máximos razonables, supondría un paso adelante en la tan necesaria regulación efectiva de nuestro Parque Natural que tanta presión y amenazas soporta».

Además de la histórica preocupación por la calidad del agua y el estado de conservación de las praderas de posidonia, la institución insular ha afirmado que «ahora tenemos estudios que demuestran que también afecta a nuestra calidad del aire».

Formentera cuenta con una ley de sostenibilidad medioambiental, puesto que de ella depende el futuro de la calidad de vida. «La apuesta debe complementarse con medidas coordinadas por parte de las administraciones que gestionan el puerto de la Savina tendentes a hacer cumplir las normativas medioambientales de aplicación que se vulneran en el Parque Natural».

También se ha denunciado «un retraso que los datos demuestran está pasando factura a los recursos medioambientales de Formentera», añadiendo que, «tras la sobreexplotación del verano asistiremos atónitos como nadie defiende el interés general y empresas cancelan sin consecuencias todas sus frecuencias y desaparecen del horario las que hacen posible la conexión con los primeros o últimos vuelos».

«El decreto de transporte marítimo tiene que poner orden, para garantizar unos mínimos y unos máximos en las expediciones, es una necesidad urgente que hay que afrontar con decisión y voluntad política, nuestra formación continuará reclamando y trabajando en todos los espacios políticos donde cuenta con capacidad de incidencia», concluyeron ayer en un comunicado de prensa.