Fachada del Parque de Bomberos de Formentera. | Toni Ruiz

El Servicio Insular de Prevención, Extinción de Incendios y Salvamento de Formentera carece de evaluación de riesgos tanto del centro de trabajo como de las diferentes categorías de los bomberos, así como de instrucciones de trabajo, protocolos de actuación y una dotación mínima de guardia de tres efectivos, «lo que pone en riesgo la seguridad y la integridad física y psíquica del personal». Así lo pone de manifiesto un informe elaborado por el Caporal de los bomberos de Formentera, que fue remitido al Consell insular el pasado 7 de julio, aunque el grupo de la oposición no lo recibió hasta el día de ayer.

Dicho informe señala que, entre otras cosas, «no se puede garantizar el trabajo en binomios» al haber sólo tres personas de guardia, además de la sobrecarga de trabajo en las intervenciones; el hecho de que en casi todos los servicios hay que salir con dos vehículos, uno ligero y otro pesado y la dificultad de conducir un vehículo pesado con sólo un bombero conductor de dotación en el vehículo dada la complejidad de las vías de comunicación y caminos de acceso de la isla. Asimismo, destaca que en la mayoría de los servicios que se realizan en la isla se tienen que llevar a cabo por un número muy inferior de efectivos de lo que exigen las actuaciones, lo que pone en peligro tanto a los propios profesionales como a las intervenciones.

En cuanto a los períodos de descanso, la legislación establece que tiene que haber un mínimo de 12 horas de descanso entre dos jornadas consecutivas, aunque dicho límite se rebaja a 10 horas en labores de extinción de incendios forestales. «El actual turno del parque de bomberos es de 2/4, es decir, dos turnos consecutivos de 10 a 22 horas de manera presencial y de guardia localizada de 22 a 10 horas, lo que hace un total de 48 horas consecutivas, por lo que se respetan las 12 horas de descanso entre turno y turno». En este sentido el informe recuerda que existen sentencias judiciales que refuerzan que estas horas de guardia localizada deben contar como horas efectivas de trabajo «porque la incorporación al parque tiene que ser tan rápida como sea posible». Además, recuerda que de los 12 bomberos que hay actualmente en Formentera «ocho tienen su residencia fuera de la isla» ya sea por conciliación familiar o por los elevados precios del alquiler.

En cuanto a las medidas correctoras, además de la pertinente realización de las evaluaciones de riesgos laborales, obligatorias para cualquier empresa, el informe recomienda la ampliación de los efectivos de los equipos de trabajo que acuden a las emergencias, «siempre profesionales y con dedicación exclusiva», hasta llegar a la dotación mínima de cinco efectivos con poco margen de fluctuación «para asegurar así el desarrollo de las labores operativas en condiciones mínimas». También recomienda que asegure la información y formación continua y constante de los trabajadores; continuar implantando y revisando con cuidado procedimientos de trabajo y actuación alrededor de lo que dictaminen las evaluaciones del puesto de trabajo y el análisis de las labores; coordinar de forma efectiva las actividades preventivas cuando se dé la concurrencia de diversos organismos de emergencia y la revisión constante y la adquisición cuando así se determine, de recursos materiales y equipamientos de trabajo.