Los servicios de Salvamento Marítimo detectaron anteayer una mancha gigante, prácticamente del mismo tamaño que la isla de Tagomago, a 12 millas al noreste de este enclave.

Un centro de seguimiento de Noruega que se encarga de controlar el estado de los mares detectó la mancha por satélite y puso en alerta a los servicios de vigilancia marítima con base en las Islas. Posteriormente, el avión que cubría la línea Palma-Eivissa recibió un aviso para que verificara su existencia. Desde el aire, la llamativa mancha se veía tan grande como la propia isla de referencia.

«En un principio pensamos que se trataba de hidrocarburos, aunque nos extrañó, porque no hay grandes petroleros por la zona», señalaron ayer fuentes de Salvamento Marítimo. Después de la señal de alarma y de que se verificara la existencia de esta mancha gigante, a media tarde una embarcación de Salvamento Marítimo rastreó a conciencia toda la zona al noreste de Tagomago, sin encontrar ningún resto de combustible.

Realizadas las investigaciones, se descubrió que la mancha en cuestión no existía, sino que se trata de un efecto provocado por los movimientos de los fondos marinos.