Enrique Donaire, M. López Colmenarejo y José Ramón Pérez.

Los directores comerciales y de programación del grupo Iberia, Enrique Donaire y José Manuel López Colmenarejo, comunicaron ayer al Govern la estrategia de la compañía para las rutas interislas, ya que a partir del próximo 31 de octubre serán sustituidos los reactores de Aviaco e Iberia por aviones turbohélices Fokker 50 de la compañía regional de Iberia, Air Nostrum.

El conseller d'Obres Públiques i Transports, Josep Antoni Ferrer, se mostró, según Iberia, satisfecho por la decisión de Iberia, «ya que la nueva programación prevista incrementa la frecuencia de vuelos interislas en un 123% con relación al año anterior y se opera prácticamente como un auténtico puente aéreo. La oferta de asientos ascenderá a 2.350 semanales por sentido, que representa un dos por ciento más que el año pasado y muy por encima de la demanda», explicaba ayer Donaire tras mantener el contacto con el conseller.

Esta nueva oferta de vuelos supondrá ofrecer hasta siete frecuencias diarias (14 vuelos) entre Mallorca con Menorca y Mallorca con Eivissa. Iberia ha pretendido con ello superar uno de los principales problemas de comunicación interislas, como era la poca flexibilidad de horarios, con separación de vuelos de hasta nueve horas entre el primero y el segundo vuelo, «en la nueva programación se ofrecerán vuelos cada una o dos horas en los períodos punta, y entre tres y cuatro horas en los períodos valle o de baja demanda».

López Colmenarejo puntualizó que las rutas interislas son hasta la fecha deficitarias, de ahí que en el acumulado enero-octubre está previsto que se pierdan algo más de 300 millones de pesetas.

Donaire añadió que la operación interislas interesa a Iberia, «pero la única manera de mantener el nivel de producción para rentabilizar estas rutas era mediante los turbohélices de Air Nostrum».