OSCAR RIBAS Los ibicencos están poco acostumbrados a invertir en bolsa; únicamente compran acciones de las Ofertas Públicas de Valores (OPV) que se anuncian por televisión, como Telefónica, Repsol o Telepizza. El resto es todavía un mundo desconocido para ellos, según explicó ayer la directora de la oficina de Eivissa de Beinto&Monjardí, (B&M), Nieves Sala, la prestigiosa sociedad de valores y bolsa que ayer presentó su primera oficina en la isla. Al acto asistió uno de los fundadores de la compañía, Juan Monjardín, quien indicó que la razón de la apertura de la delegación ibicenca se debe al alto nivel de las rentas pitiusas.

«El inversor ibicenco no está todavía muy introducido en los temas financieros; compra acciones a través de los bancos y después no sigue demasiado su evolución. La mayoría prefiere dejar su dinero en fondos de inversión», indicó la responsable de la agencia ibicenca.

Con la apertura de esta delegación, B&M espera resolver esta situación, entre otras cosas, porque "según aseguran" han rebajado el porcentaje por la intermediación y han habilitado la primera sala de la isla de acceso público desde la que se puede seguir, en tiempo real, las evoluciones del mercado.

Benito&Monjardín intermedió, a lo largo del primer semestre de 1999, por valor de 2'28 billones de pesetas, lo que representa el 4'31 por ciento sobre los 25 billones negociados por el conjunto del mercado.