La evolución de las hipotecas urbanas y rústicas durante los nueve primeros meses de 1999 en Balears ha superado todas las previsiones, dado que el número de operaciones ha crecido un 27'8 por ciento, pasando de las 17.009 del pasado año a las 17.745, y el importe de las mismas ascendió a 219.437 millones, un 23'9% más respecto al mismo periodo de 1998 (177.012 millones), según datos facilitados por el Instituto Nacional de Estadística y el Departamento de Economía de la Confederación de Asociaciones Empresariales de Balears (CAEB).

Para la patronal, en estos momentos en las Islas, «se está produciendo un auténtico fenómeno comprador de primera y segunda vivienda, tanto es así que los promotores venden sobre plano y todo hace indicar que la demanda irá al alza en lo que queda de ejercicio y principios del 2000».

La caída de los tipos de interés a mínimos históricos, la mejora de la coyuntura del empleo y las buenas perspectivas económicas, según los expertos, son las causas que justifican esta dinámica compradora en el sector inmobiliario balear.

El fuerte impulso del mercado hipotecario ha provocado en las Islas en lo que va de año un aumento del precio de la vivienda nueva por encima del 15 por ciento, pero la demanda compradora sigue aumentando, según refleja el último informe de la sociedad de tasación inmobiliaria TINSA.

Desde la CAEB indican que hubo una ligera recesión en el número de hipotecas durante lo meses de julio y agosto, «pero en septiembre hubo un repunte del 10'5 por ciento, ya que se formalizaron 2.143 hipotecas, que sumaron en total 30.986 millones, un 58'3 por ciento más que en septiembre de 1998».