Desde el primer momento, los pequeños se acercaron con sus padres para contemplar de cerca este belén.

Hubo que esperar un poco "la inauguración estaba prevista para el sábado", pero valió la pena. Ayer por la tarde, la carpa instalada en Vara de Rey abrió sus puertas para que más de un centenar de chavales descubriera el secreto que guardaba en su interior: el belén gigante que, un año más, ha organizado el Ayuntamiento de Eivissa. Al acto asistieron el alcalde, Xico Tarrés, y la concejala de Fiestas, Sandra Mayans. Desde el primer momento se formó una larga cola de niños y padres en los alrededores para acceder al interior de este recinto.

Los artistas que han levantado esta monumental obra son Ricardo Alvarez, presidente de la Asociación de Vecinos de Platja d'en Bossa, y Ricardo Ruiz. Ambos han invertido cerca de dos meses de su tiempo en dejar impecable este belén.

Entre otros detalles, cabe señalar que todas los árboles que lo decoran se han hecho a base de plantas que ellos mismos han recogido por los campos de las Pitiüses. Tampoco faltan los juegos de luces "que hacen las veces de hogueras" y las cataratas de agua natural; nada del típico papel de plata que todos utilizamos. «Yo nunca estoy contento del todo con las cosas que hago, pero hoy estoy realmente orgulloso de esta obra», comentó Ruiz, quien se dedica profesionalmente a la pintura y escultura.

El nacimiento permanecerá abierto hasta el día 6 de enero, como explica Mayans. El Consistorio espera ahora que todos los chavales de la ciudad pasen por él, para ver cómo José y María contemplan al niño Jesús, mientras, a lo lejos, los camellos llevan sobre sus jorobas a los tres Reyes Magos.