Los agentes de la Policía Local de Santa Eulària han comenzado a informar a la población sobre la habilitación de zonas azules de aparcamiento en el municipio. El alcalde, Vicent Guasch, confirmó ayer que las calles escogidas para esta experiencia piloto son Sant Jaume, Mariano Riquer Wallis y el Paseo de s'Alamera.

El objetivo de la iniciativa es, en palabras del alcalde, «poder facilitar a los visitantes y residentes mayores facilidades para estacionar sus vehículos».Vicent Guasch añadió que este cambio «irá en beneficio de todos», aunque se ha adoptado para evitar perjuicios a los comercios, bares y restaurantes principalmente. Según explicó ayer el regidor municipal, «mucha gente viene a Santa Eulària a hacer compras pero decide irse porque nunca encuentra aparcamiento. Esto se debe a que muchos funcionarios y oficinistas ocupan plazas de aparcamiento cercanas a establecimientos comerciales». Estas plazas quedan ocupadas durante toda la mañana, algo que perjudica claramente a los negocios. «El objetivo -recalcó ayer Guasch- es dejar esta zona lo más libre posible e invitar a los trabajadores que normalmente aparcan en estas tres calles a que estacionen en áreas un poco más alejadas y que caminen hasta sus trabajos».

Durante un mes -o mes y medio- la experiencia será provisional. Los agentes vigilarán las zonas azules pero no cobrarán por estacionar, aunque sí pondrán multas a los conductores que no renueven la tarjeta, transcurridos los sesenta minutos.

Una vez pasado el período de prueba y si no se presentan problemas graves comenzará el cobro real por cada hora de aparcamiento, cuyo precio no ha sido determinado todavía. La medida provisional iba a entrar en funcionamiento hoy pero un retraso en el envío de los relojes de papel en los que se marcará el tiempo de aparcamiento ha obligado a retrasar su puesta en marcha hasta mañana miércoles.