Los propietarios del antiguo cine Cartago negaron ayer haber
realizado obras de envergadura en el interior del local, a pesar de
que han recibido una orden de paralización por parte del equipo de
gobierno. Lo que sí reconocieron es que habían quitado todas las
instalaciones sanitarias de los cuartos de baño con el objetivo de
mejorar su estado y modernizarlos. Según explicaron a este
periódico, habían pedido un permiso de obra menor al Ayuntamiento
de Eivissa el pasado 20 de febrero y, en vista del tiempo
transcurrido, consideraban que ya podían ejecutar estos trabajos.
Los dueños del local, que se encuentra situado bajo la actual
sala de proyecciones del Cartago, también negaron que tengan
previsto establecer un café-concierto y señalaron que ni ellos
mismos saben todavía qué es lo que quieren hacer. Según ellos, los
propios vecinos están agradecidos de los trabajos que hasta ahora
se han ejecutado, porque se ha extraído tanta porquería del local
que han disminuido los malos olores de la zona. «Lo único que hemos
hecho ha sido adecentar el local y los vecinos están encantados
porque hay menos olores. Hemos encontrado 40 gatos muertos y estaba
todo comido por las ratas», aseguraron.
En el día de ayer solicitaron en las oficinas municipales de la
calle Castilla una solicitud para poder pintar e insonorizar el
local, que en estos momentos ya no tiene butacas y del que se han
quitado las telas que cubrían las paredes y la antigua moqueta.
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