Tres grupos de jóvenes participaron ayer en Santa Eulària en una gimkana infantil organizada por el Grupo Socut Amunt de la localidad. La plaza del Ayuntamiento fue el escenario inicial de una iniciativa cuyo primer paso consistía en aprender un abecedario propio y que poco a poco fue tomando todos los rincones de la ciudad.

Incluida dentro del programa de fiestas de la localidad, la prueba contaba con 17 bases, cada una de ellas controlada por un monitor que se encargaba de que nadie pasara al siguiente nivel sin haber satisfecho favorablemente el requerimiento.

Conocimientos del municipio, de sus costumbres y tradiciones, habilidad y rapidez eran los requisitos esenciales para lograr el primer puesto en esta experiencia que se desarrolló desde las diez de la mañana hasta el mediodía. El folleto donde se describían las bases incluía además un código ético de comportamiento y una serie de compromisos personales en relación al respeto por el resto de concursantes.

· R. D.