Dos trabajadores sociales de la ciudad noruega de Oslo, Borge Erdal y Kristin Gudbrandsen, se encuentran en Eivissa para intercambiar experiencias en el ámbito de la drogadicción, sobre todo el consumo de éxtasis entre los jóvenes noruegos que vienen a Eivissa de vacaciones.

El concejal de Bienestar Social de Eivissa, Santiago Pizarro, se reunió ayer con los dos trabajadores noruegos, que permanecerán en la isla hasta el 7 de agosto, y les informó de las actuaciones que se realizan, como el plan de prevención de drogas o el Forum, un proyecto conjunto con nueve ciudades europeas. La información que recojan de Eivissa servirá para hacer un estudio y la divulgación de un folleto informativo sobre los peligros de la ingestión de drogas con el fin de establecer políticas de prevención en Noruega. «Beach and Boogie» (playas y marcha») es la imagen que se venden en los paquetes turísticos del país escandinavo. «Vienen gente muy joven a las discotecas de Eivissa, que son el centro de Europa, el reclamo es la droga, el éxtasis, la música y las discotecas», señalan acerca de la imagen en Noruega de Eivissa. Sin embargo, advierten que «eso no quiere decir que todos los noruegos van a venir a la droga y playa, pero la gente joven está atraída por el ambiente nocturno», apostillan.

Ante esta situación, la función de los trabajadores sociales es la de establecer unas pautas de prevención: «Avisar del peligro que puede suponer el consumo de drogas. Que no es necesario consumirlas para pasárselo bien y, en último caso, si consumen que sigan unas pautas», indican. Pizarro sostiene que este intercambio permitirá realizar actuaciones similares en Eivissa: «No va a ser muy diferente de lo que se tenga que hacer aquí, pero si en su caso las prácticas de riesgo se reducen al verano, en Eivissa son los doce meses del año», afirmó.