GUILLERMO ROMANÍ Al regreso, pese al cansancio de tres días muy ajetreados, las mayoría de los participantes en el intercambio cultural entre Torroella y Formentera estaban de acuerdo en que se «ha puesto el listón muy alto» y que era preciso empezar a trabajar bien pronto, ahora que todos tienen fresco el recuerdo del viaje. «Habrá que esforzarse para tratarlos tan bien como nos han tratado a nosotros».

Los ayuntamientos de ambos municipios materializaron el primer intercambio cultural entre ambas instituciones que, en el futuro, podría traducirse en el hermanamiento oficial de la ciudad que vio nacer a Guillem de Montgrí, conquistador de Formentera y Eivissa en 1235.

Una nutrida representación de formenterenses se desplazó hasta la localidad gerundese. En total fueron unas 170 las personas que viajaron hasta Girona. La comitiva pitiusa estuvo presidida por el alcalde, Isidor Torres, el concejal de cultura, Felip Portas y el de medio ambiente, José Ramón Mateos, a quienes acompañaba, asimismo, el vicepresidente del Consell Insular pitiuso y conseller para los asuntos de Formentera, Santi Ferrer.

Por parte del ayuntamiento anfitrión estuvieron presentes en todos y cada uno de los actos el alcalde Josep Ferrer y la concejala de cultura Mercè Font. La expedición pitiusa incluyó miembros de las colles de ball pagès de la isla, integrantes del grupo teatral l'Esglai y alumnos del IES Marc Ferrer; éstos últimos representaron una obra relacionada con la conquista catalana. Aires Formenterencs y el grupo de rock Spioks pusieron música al encuentro. Tanto uno como otro grupo fueron muy aplaudidos.