El Grupo Verde Europeo se ha dirigido al ministro de Medio Ambiente, Jaume Matas, para pedirle que no permita la realización de los vertidos de fangos provenientes de las obras de la construcción del dique de Botafoc hasta que se lleve a cabo un estudio de evaluación de impacto ambiental del lugar donde se depositarán.

El Grupo Verde considera que «estos vertidos pueden ser perjudiciales para el fondo marino y negativos para el medioambientw». Además, alega que nunca han figurado en el proyecto original que está subvencionado por los fondos de cohesión de la Unión Europea.

Los ecologistas piden que hasta que no se sepan los resultados del estudio de impacto medioambiental que no se permita continuar con los trabajos que se están realizando en el futuro dique.