Retirada de cables obsoletos

Gesa recalcó ayer la necesidad de cambiar este sistema, medida a la que se resisten algunos usuarios. Entre las mejoras está la estética, con la retirada de las aparatosas redes antiguas; la reducción de las pérdidas energéticas, lo que produce una reducción de consumo por parte de la planta que repercute, a su vez, en una disminución directa de las emisiones de contaminantes en la producción de energía.

La mejora de la seguridad de las instalaciones particulares es otro de los beneficios ya que si no se sustituye este tipo de cableado, que puede estar realmente deteriorado, se puede producir un cortocircuito, una de las primeras causas de incendios en las viviendas. Además de estas ventajas, Gesa señala otras como la posibilidad de poder utilizar toda una serie de electrodomésticos que, con la red de 125 w, obliga a utilizar un transformador. A pesar de que las instalaciones particulares son competencia del usuario Gesa asume este cambio en su práctica totalidad. El abonado debe sufragar parte de los gastos.

Gesa insta a los usuarios que todavía mantienen la instalación antigua a ponerse en contacto con la empresa para que les cambie la instalación. En este sentido han activado un procedimiento de contacto por carta en la que explican al abonado el procedimiento y las ventajas que supone el cambio de instalación. En Eivissa ciudad quedan zonas por retirar como sa Penya y varias calles de Dalt Vila. Además hay usuarios con instalaciones obsoletas en Santa Eulària y Sant Josep, entre otras zonas.