La celebración de la festividad de San Rafael de ayer resultó tener un toque bastante veraniego respecto a años anteriores. Las altas temperaturas registradas en los últimos días también se dejaron sentir el día del homenaje al Patrón que reunió a varias decenas de personas en la plaza de la iglesia.
La misa solemne, oficiada por el párroco de Sant Agustí, Miguel Àngel Riera, reunió en las primeras filas de asientos del templo a varias autoridades. Entre ellas el alcalde de Sant Antoni, Antoni Marí Tury la consellera de Cultura del Consell Insular, Fanny Tur, así como varios concejales de la corporación municipal que, además de seguir el oficio religioso, participaron en la procesión que discurrió alrededor del templo una vez finalizada la misa, en la que el oficiante centró su homilía en los lazos de unión entre las distintas religiones a través de la figura alada de Sant Rafel.
El coro parroquial de Sant Rafel junto al de la Iglesia Anglicana pusieron el toque musical al acto junto a los componentes de la Colla de Sant Rafel, que además de marcar el paso durante la procesión, realizó una importante muestra folklórica después de los actos religiosos.
Fue en este momento cuando los vecinos y algún que otro turista despistado se reunieron en un gran corro en la plaza de la iglesia para seguir los pasos de baile de los componentes de la agrupación de danza mientras degustaban unos deliciosos bunyols y orelletes y saciaban su sed bebiendo vi pagès de varios porrones, ofrecido todo ello por la comisión de fiestas.
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