En lo que va de año, el Consell pitiuso ha subrogado en 10 ocasiones las competencias en disciplina urbanística de tres municipios, una cantidad que contrasta con la pasividad en esa materia mostrada por la institución hasta la llegada al poder de los progresistas. Las diez subrogaciones se han ejecutado entre los meses de abril y octubre. Ocho de los casos corresponden al Consistorio de Sant Josep, y los dos restantes se los reparten Sant Joan y Sant Antoni.

El Consell decidió hacer uso de esa herramienta legal después de que esos tres ayuntamientos hicieran oídos sordos a los continuos requerimientos para parar obras supuestamente ilegales que se desarrollaban en sus términos. Visto que no actuaban, el Consell decidió hacerse cargo de esa competencia municipal.

El último caso ha sido el de una cantera sin licencia situada en el kilómetro 1'3 de la carretera entre Sant Josep y Sant Antoni: el primer escrito dirigido al Ayuntamiento de Sant Josep para que iniciara un expediente sancionador o suspendiera las obras fue remitido el 23 de enero; hasta hoy el Consell no ha recibido respuesta, pese a que «la actividad extractiva avanza progresivamente», hasta abarcar 2.000 metros cuadrados.

La elevada cantidad de subrogaciones resgistradas hasta ahora representa un hecho sin precedentes en la reciente historia de las Pitiüses y es un reflejo de la pugna que mantienen en materia urbanística los progresistas que gobiernan en el Consell con el equipo de Gobierno de Sant Josep, del PP, que rehuye intervenir en estos asuntos. Según el conseller d'Ordenació del Territori, Josep Marí Ribas, Agustinet, el comportamiento del Ayuntamiento de Sant Josep «refleja su falta de voluntad para hacer cumplir la disciplina urbanística».

De los diez expedientes subrogados en lo que va de año, dos corresponden a viviendas edificadas sin licencia, una en Sant Josep (en zona protegida por la Ley de Espacios Naturales) y otra en Sant Antoni, donde se abrió un camino con dos ramales e incluso se construyó una falsa ruina con la presumible intención de despistar a los celadores.

Los otros siete expedientes de Sant Josep subrogados por el Consell corresponden a una vivienda con licencia construida en zona LEN y afectada por la norma territorial; a cuatro licencias dadas también en áreas protegidas; a los cambios realizados por Salinera Española en las motas de ses Salines; a la construcción de una valla en un camino vecinal; a la ampliación en una planta de una vivienda de ses Salines; al polémico caso de Cap Llentrisca y a la explotación sin licencia de una arenera ubicada en las cercanías del núcleo urbano de Sant Josep.