J. M. R. La Unión General de Trabajadores (UGT) se ha propuesto recoger 2.000 firmas en las Pitiüses para respaldar una iniciativa legislativa popular encaminada a alcanzar «la estabilidad y la seguridad en el empleo», una campaña que se desarrollará desde hoy en toda España y que necesita medio millón de rúbricas para que prospere el primer trámite de esta proposición de ley. La iniciativa persigue contrarrestar la reforma laboral acometida a comienzos de año por el Gobierno central, que, a juicio del secretario general del sindicato en las Pitiüses, Diego Ruiz, no ha logrado responder a las necesidades del mercado, no ha conseguido crear empleo estable y ha agravado la precariedad en el trabajo.

El principal objetivo de la iniciativa legislativa popular es «asegurar que la contratación indefinida sea la regla general», así como limitar la contratación temporal a los supuestos que objetivamente estén justificados. El deseo del sindicato es que el contrato a tiempo parcial sea una «opción voluntaria del trabajador, y no la única alternativa para poder trabajar». Además, abogará por defender los derechos de los trabajadores en las subcontratas. Así, la iniciativa pretende evitar que la subcontratación sirva «para eludir responsabilidades empresariales y burlar los derechos de los trabajadores». Asimismo, la UGT quiere acabar con la cesión ilegal de empleados de una empresa a otra.

Según expuso ayer Diego Ruiz en una rueda de prensa, también se incluye en la iniciativa popular el propósito de que se garantice la salud y la seguridad en el trabajo, de manera que se eviten condiciones precarias que «atenten» contra la vida y salud de los empleados. En ese sentido, la UGT sigue con su objetivo de reducir la jornada a 35 horas semanales, lo cual mejoraría las «condiciones de trabajo en las actividades más peligrosas», se afirma desde el sindicato. El sindicato necesita recoger esas 2.000 firmas en Eivissa y Formentera antes del próximo 25 de diciembre.