El tránsito de la ciudad de Eivissa es su principal fuente de ruidos, según certifica el informe sobre contaminación acústica que se presentó ayer tarde a los miembros de la comisión consultiva de la Agenda 21. Y, dentro de las diferentes franjas horarias en las que se han realizado mediciones, las seis de la tarde ha resultado ser la hora más conflictiva, por encima de la mañana, la noche o la madrugada y tanto en temporada alta como fuera de temporada.

Las conclusiones de este estudio, incluido en la auditoría medioambiental encargada por el Ayuntamiento, fueron presentadas ayer por la concejala de Ciudad Sostenible, Marta Roldán, y por la técnico de Medio Ambiente Paz Hernández. Según explicó la concejala, en próximas sesiones se intentarán plantear medidas correctoras a los problemas detectados en este estudio.

El informe concluye que no existe contaminación acústica en ninguna zona natural del municipio, es decir, ses Feixes o es Soto, donde las mediciones han revelado que no se superan los 55 decibelios y que el ruido medio se sitúa en los 44 decibelios aproximadamente. Pero las cifras suben notablemente cuando se realizan mediciones en el centro de la ciudad. La parada de autobuses de Sant Antoni o la rotonda de Can Misses son algunos de los puntos más conflictivos y, entre las zonas industriales, la desaladora se lleva la palma seguida de la central térmica y la depuradora.

El estudio también tiene un apartado dedicado a movilidad, en el que se analiza la situación del tránsito y de la circulación.