La consellera de Benestar Social, Sofía Hernanz, lleva negociando varios meses con los ayuntamientos.

El Consell Insular ultima con los ayuntamientos de las Pitiüses la cesión del plan de prestaciones básicas que hasta ahora gestiona el Patronato de Salud Mental. Después de cinco meses de negociaciones, la consellera de Benestar Social, Sofía Hernanz, y los ayuntamientos de las Pitiüses ultiman este acuerdo que permitirá a los servicios sociales de cada municipio estar más cerca de la realidad social a través de esta descentralización. Este cambio viene determinado, además, por la asunción de transferencias de bienestar social del Govern al Consell Insular.

El servicio de ayuda a domicilio presta apoyo a las familias en su casa a través de la intervención de las trabajadores familiares. El servicio constituye un conjunto de actuaciones dirigidas a facilitar el desarrollo o mantenimiento de la autonomía personal, prevenir o retrasar el deterioro individual o social y promover condiciones favorables en las relaciones familiares y de convivencia contribuyendo, además, a la integración y permanencia de las personas en su entorno habitual mediante el apoyo de tipo personal, psicosocial, doméstico, educativo y asistencial.

El apoyo en los domicilios permitirá facilitar un grado de autonomía al favorecer la permanencia de las personas en los hogares, tanto si vive solo o acompañado. Hasta ahora eran los ayuntamientos quienes solicitaban el servicio de ayuda al Patronato de Salud Mental pero, a partir de ahora, serán los ayuntamientos quienes gestionen esta actuación social.

Durante 2000, los servicios sociales de atención primaria ubicados en los diferentes municipios atendieron 2.339 demandas efectuadas por 1.201 personas o familias.