Los grupos popular y mixto del Consell Insular pueden forzar hoy la devolución de los presupuestos de la institución para el año 2002 al equipo de gobierno, una circunstancia que no se ha dado nunca en la historia de la institución y que impediría que se llegaran a votar las cuentas y obligaría al equipo de gobierno a convocar una nueva sesión plenaria para tratar de sacar adelante los presupuestos que, teóricamente, deberían enmendarse.

El Partido Popular ya anunció anteayer que había presentado una enmienda de devolución y Joan Buades, conseller del grupo mixto, lo comunicó ayer tarde y lo hará efectivo esta mañana a las diez (el pleno es a las once) si antes no ha habido un gesto del equipo de gobierno para negociar las cuentas o decidir que sean retiradas del orden del día para que pueda haber nuevas conversaciones. Buades afirma que si se respeta lo establecido en el reglamento -y reconoce que tiene dudas sobre la actitud que adoptará el equipo de gobierno- las enmiendas de devolución deberían votarse en bloque y si esa votación sale adelante los presupuestos caerían. Previsiblemente, tanto el PP como Buades votaría a favor de las enmiendas de devolución, pues si bien están centradas en aspectos muy diferentes se votarían conjuntamente, siempre según las explicaciones ofrecidas ayer por Buades.

Los ecologistas quisieron clarificar ayer su postura en vista de que el equipo de gobierno reitera que no puede negociar con Els Verds porque estos no han presentado propuestas concretas. Marta Roldán, coordinadora del partido, el propio Buades y Ramon Mayol, miembro de la junta directiva, dieron a conocer todos los documentos que se han estado manejando en los últimos días, incluida la propuesta que Els Verds hizo llegar al Pacte el día 17 de este mes en la que se reclaman 100 millones para la gestión de los parques naturales, la creación de un gabinete de gestión de residuos, 30 millones para el fomento de la agricultura ecológica o programas de eficiencia y ahorro de agua en redes. Els Verds dejó ayer bien claro que si el Pacte quiere llegar a un acuerdo con un partido ecologista, lo mínimo que tiene que hacer es mantener el presupuesto en materia de medio ambiente y no reducirlo un 51 por ciento como ocurre este año. «Els Verds no queremos nada para nosotros y no tenemos peleas porque sí, las tenemos por el medio ambiente, el bienestar social, los ayuntamientos, Formentera, etc.», dijo Buades.

Al margen de la partida de medio ambiente, el bienestar social, la agricultura, la cooperación municipal y la cooperación con el Sur separan a las dos partes. Los ecologistas dicen que pese a que hay más dinero para bienestar social porque se transfieren las competencias, el Consell dedica menos dinero propio a esta materia, que consideran prioritaria, entre otras cosas porque así se pactó cuando se negoció el traspaso de las competencias de carreteras. En cooperación municipal, los ecologistas denunciaron que hay 50 millones más que el año pasado, pero son 25 menos que en el año 2000, cuando el presupuesto tenía 2.000 millones menos. Els Verds también afirma que es imposible saber si se destinará el 0'7 por ciento al Tercer Mundo porque no consta.