El Consell Insular estrena con el año nuevo una competencia con alta financiación. Vicent Tur, vicepresidente primero de la institución, será el encargado de gestionar los 803'98 millones de pesetas con los que el Govern balear ha transferido a la institución pitiusa las carreteras, concretamente las quince que hasta ahora eran de titularidad autonómica y que suman 158'5 kilómetros.

De esa cantidad, se calcula que unos 117 millones se tendrán que invertir en personal y este es, precisamente, un capítulo complicado. El equipo con el que actualmente contaba el Ejecutivo balear quedará completamente desmantelado y será el Consell quien tenga que formar un nuevo equipo. Los cálculos efectuados durante el proceso de negociación señalan que las Pitiüses dispondrán, aproximadamente, de 668 millones de pesetas anuales para inversiones reales. Pero, además, y en vista del mal estado en el que se encuentran actualmente las carreteras, el Govern se ha comprometido a invertir 1.000 millones de pesetas en el plazo de tres años.

Desde la primera institución pitiusa ya se ha manifestado que con la llegada de las competencias los principales objetivos serán garantizar la máxima seguridad de las carreteras y mantenerlas en un óptimo estado de conservación. Vicent Tur manifestó recientemente que una de las primeras decisiones que se adoptará es la realización de un completo estudio sobre seguridad para conocer más de cerca los puntos conflictivos, saber cómo pueden evitarse y acabar con ellos.

El vicepresidente primero cree que será necesario que pase un tiempo para que el nuevo departamento esté perfectamente organizado y funcione con fluidez. Una de las ventajas es que algunas de las grandes obras pendientes de ejecución están ya en marcha y muy adelantadas (caso de la variante de Santa Eulària o la ronda norte de Sant Antoni) o han sido ya redactados los proyectos e incluso adjudicados (como la mejora del firme de la carretera de Santa Eulària y la reforma de la carretera de Sant Josep). Al margen de estos trabajos también son considerados prioritarios la rotonda de Sant Rafel y el acceso al segundo cinturón de ronda desde Can Misses, lo que reducirá el tráfico en el primer cinturón.