El concejal de Economía y Hacienda del Ayuntamiento de Eivissa, Joan Bonet, calificó ayer de «cúmulo de incoherencias» las acusaciones del PP sobre el incumplimiento del presupuesto municipal y el uso de decenas de millones destinados a inversión para ampliar el capítulo de gasto corriente. Bonet aseguró que todas las obras previstas en el presupuesto de 2001 salvo dos se ejecutarán y recalcó que prácticamente todas están adjudicadas y se espera que las obras comiencen tras las fiestas. Es el caso de las peatonizaciones o de la reforma de la calle Al Sabini.

Bonet explicó que sí hay dos proyectos que sufrirán modificaciones: la tercera fase de la red de pluviales, presupuestada en 100 millones de pesetas, y la remodelación del ala norte del Consistorio, valorada en 36 millones. En el primero de los dos casos, el Pacte cree que es beneficioso para la ciudad no acometer el trabajo puesto que va a estar incluido en un paquete de obras hidráulicas financiadas por la Unión Europea.

En el segundo, el equipo de gobierno ha decidido retrasar la reforma porque implicaría dejar sin espacio físico a los servicios técnicos del Ayuntamiento y, para ello, antes se les quiere encontrar una ubicación alternativa y temporal. «Pero todo ese dinero -señaló Bonet en relación al presupuesto de ambas obras- se utilizará para inversión». El concejal avanzó que su destino concreto será la mejora de la vía pública y apuntó que en poco tiempo podrá detallar más el proyecto.

«El PP ha hecho una puesta en escena de los mismos argumentos que utilizó en el pleno de presupuestos. Puede que ahora se haya dado cuenta de que no fue capaz de hacerse oír lo suficiente y por eso lo repite», apuntó Bonet, que añadió que mañana desmentirá con cifras las acusaciones del PP.