Gonzalo Miragall en su primera intervención como presidente, que fue seguida con atención por las autoridades. Foto: KIKE TABERNER

Gonzalo Miragall, en su primer discurso tras ser elegido anoche presidente de Fomento del Turismo, advirtió de que cualquier promoción turística de Eivissa que se haga se estrellará si no se solucionan las muchas asignaturas pendientes que tiene la isla, entre las que citó el cuidado del entorno, la seguridad ciudadana, la limpieza, la falta de agua, la proliferación de vertederos, la mejora de las playas o los problemas de transporte, especialmente el de los taxis.

Miragall reclamó un esfuerzo a la Administración pública, pero también al sector privado y a los particulares, a todos aquellos «que tienen su establecimiento descuidado» o que «no respetan los horarios de las basuras». «Si fuéramos capaces de avanzar en esto, con la promoción adecuada, las crisis nos afectarían menos», afirmó.

Unos minutos antes de que Miragall fuera proclamado presidente por asentimiento de los presentes, cercanos al centenar, José Colomar, que dejaba el cargo tras dos años de mandato, también había incidido en la misma idea. «Eivissa se ha convertido en una isla ruidosa. El problema de los taxis es un escándalo. Los tirones, la limpieza, la venta ambulante, ... estos hechos merman la eficacia de Fomento del Turismo. Y hay que reclamar a las autoridades, pero también a los propietarios», señaló. Colomar exigió que el turismo joven se ate más de cerca, pero no sólo por la policía, sino también por los propios empresarios que los alojan. «Esta movida favorece a algunos, pero perjudica a muchos», sentenció.

La propia «permisividad» de los isleños, había comentado antes, ha fomentado en los últimos años la mala imagen de la que ahora se queja Eivissa y contra la que ya se ha empezado a luchar. El ya ex presidente de la entidad también se lamentó de que durante su mandato, la Conselleria balear de Turisme y el Ibatur nunca hayan aceptado la reivindicación de que Eivissa debe recibir más recursos económicos dada su cuota de turistas en el conjunto de Balears.