El Índice de Precios al Consumo (IPC) nacional bajó un -0'1 por ciento en enero, según las cifras aportadas ayer por el Instituto Nacional de Estadística (INE). Sin embargo, en Balears los precios se incrementaron un 0'5 por ciento el mes pasado, la mayor subida de toda España, con lo que el índice interanual de inflación queda en el 3'2 por ciento. El portavoz de la Unión de Consumidores (UCE) de Eivissa y Formentera, Carlos Salinas, realizó ayer una lectura escéptica de estos resultados. Salinas considera que la cifra de aumento de Balears «se queda corta».

Así, el incremento «habitual de principios de año» de los precios del transporte y de servicios, unido «al cambio de pesetas a euros que ha dado lugar a redondeos», son dos motivos suficientes «para pensar que el IPC ha subido más de lo que dicen las cifras oficiales», señala el portavoz de UCE en las Pitiüses. Salinas considera que este aumento de precios «ha sido más que evidente en sectores como el de hostelería». El incremento experimentado por Balears es, además, un 0'6 por ciento superior a la media nacional. Un dato «preocupante», según Salinas, que apuntó que están convencidos de que« el incremento en Eivissa y Formentera ha sido todavía mayor que el de la media de Balears»; dato difícil de comprobar porque el INE no ofrece el IPC desglosado por Islas.

Los precios del vestido y del calzado (-2'3 por ciento), alcohol y tabaco (-0'1 por ciento) y ocio y cultura (-1'3 por ciento) fueron los únicos grupos del IPC balear que bajaron en enero respecto a diciembre de 2001. Los que más subieron fueron los incluidos en el apartado «otros» (2'5 por ciento) y transporte (1'6 por ciento). Otras subidas de los precios en las Islas se registraron en medicina (1'2 por ciento), comunicaciones (1'1 por ciento) y hoteles, cafés y restaurantes ( 0'5 por ciento). Entre los grupos más inflacionistas en la estadística interanual de las Islas se encuentran la enseñanza (5'4 por ciento), hoteles, cafés y restaurantes (5'2 por ciento) y alimentos y bebidas no alcohólicas (4'6 por ciento). El hecho de que la enseñanza sea el grupo más inflacionista también preocupa a la Unión de Consumidores.

Desde este mes, el IPC se calcula de acuerdo con nuevos parámetros que reflejan el cambio en los hábitos de consumo de los hogares españoles, que en los últimos años han aumentado el gasto en productos como telefonía móvil, ordenadores o comida preparada, en detrimento de otros. Este cambio en el modo de calcular el IPC «puede ser el causante de que las cifras de inflación no reflejen la realidad», a juicio de Carlos Salinas, que considera que los ciudadanos a los que se intente hacer creer que el IPC ha bajado un 0'1 por ciento «se van a reír mucho» porque «nadie tiene la sensación de que los precios hayan bajado, fuera de lo que son las rebajas de enero».

Según el INE los precios bajaron en Asturias y la Rioja, en Castilla y León, Galicia y Murcia, en Navarra, Cantabria, Andalucía, Castilla-La Mancha y Extremadura, además en Ceuta y Melilla. Por el contrario las mayores subidas correspondieron a Balears (0'5%), mientras que los precios crecieron de forma más moderada en Aragón, Canarias, Madrid y el País Vasco (0'1 por ciento en todos los casos).