El buque crucero «Costa Tropicale», el que inaugura la temporada de visitas de este tipo de embarcaciones al puerto de Eivissa, no pudo atracar ayer en el muelle de los Duques de Alba porque su calado "de 7'5 metros" superaba el fondo actual del puerto. El representante de la consignataria Umafisa Lines, José Torres, dejó constancia ayer de «las grandes molestias» que este hecho ha supuesto para el barco, que se vio obligado a que quedar fondeado «con el consiguiente riesgo para pasajeros (1.200 personas) y tripulantes (500) y los inconvenientes que ha provocado», señaló Torres que explicó que con las características actuales del puerto «ni este barco ni otros de similar calado pueden operar con seguridad».

Umafisa Lines, con el fin de minimizar el impacto negativo de este hecho, se puso en contacto ayer con el capitán del buque crucero para informarle de que a final de año «estará funcionando el dique» por lo que «para escalas del año que viene el problema del calado estará solucionado». El dique contará con un calado de unos 20 metros, aproximadamente. El barco, que portaba turistas de nacionalidad francesa, permaneció fondeado fuera del puerto desde las 07'00 de la mañana, hora a la que llegó procedente de Barcelona; hasta las 13'00 horas de ayer, momento en el que partió hacia Tánger.

«Al menos la tripulación ha podido constatar que las obras del dique de Botafoc están en marcha y que el problema estará solucionado el año que viene», señaló José Torres, que no pudo ocultar su decepción por el modo en el que ha comenzado la temporada de cruceros de este año. Hasta el momento hay 71 escalas de crucero previstas para Eivissa durante 2002 y otras 10 programadas para 2003. La mayor parte de las esperadas esta temporada, y como suele ser habitual, corresponden al mes de septiembre, cuando llegarán a puerto 20 cruceros. Umafisa cree que el dique permitirá un aumento de reservas en el futuro.