M.J./M.A/R.C. El conseller de Turisme, Celestí Alomar repartió ayer a los primeros turistas que llegaron al aeropuerto de Palma procedentes de Madrid, en el primer día de aplicación de la ecotasa, folletos de bienvenida en los que se informa sobre la contribución de los visitantes a la mejora del medioambiente, pero donde no se les informa del nuevo impuesto. «No se pretende informar a los turistas sobre el pago del impuesto, pues esta información corresponde hacerla a los tour operadores, sino asegurarles que todo lo que se recaude como consecuencia de su estancia en Baleares se invertirá con toda transparencia», dijo Alomar. El conseller recordó el «alto nivel de comprensión respecto a la filosofía y a los objetivos del impuesto turístico» que indican las encuestas y que las inversiones «se destinarán a proyectos diferenciados y que no pueden financiarse por otra vía».

«El éxito del impuesto turístico, aseguró Alomar, radicará en la transparencia sobre lo que hagamos y este es un compromiso con la población de las islas y con las regiones que miran nuestra experiencia como algo novedoso capaz de conducir a un modelo turístico nuevo, más equilibrado y respetuoso con el medioambiente».

Por su parte, el portavoz del PP en el Parlament, Joan Flaquer, destacó ayer la «gran confusión que ha provocado el inicio de la recaudación de la ecotasa». «Estamos dando una mala imagen en el exterior. Algunos turistas pagan el impuesto, otros no lo abonan porque lo asumen los hoteleros, y en algunos establecimientos turísticos se entrega un bono de un euro a canjear en servicios del hotel. Esta imagen no corresponde a un destino de calidad como es Balears». Para el dirigente del PP, el inicio de la recaudación de la ecotasa «coincide con unas previsiones muy negativas para el sector turístico». «En la feria de Londres ha vuelto a confirmarse que no es el mejor momento para aplicar este impuesto en Balears», subrayó.

Mientras tanto, el vicepresidente del Govern y conseller d'Economia, Pere Sampol, ve normal que en el primer día de aplicación del nuevo impuesto se haya producido una cierta confusión entre los turistas. «Me imagino que el primer día de la ecotasa debe ser igual que el primer día que se aplicó el IVA, pero nos acostumbraremos muy pronto». Finalmente, el conseller de Treball, Eberhard Grosske, quiso ayer restar trascendencia al primer día de la recaudación de la ecotasa. «Es un impuesto más de los muchos que paga el turista y su cobro debe producirse con total normalidad. La recaudación de la ecotasa debe desdramatizarse después de la batalla política que han planteado los hoteleros para evitar que el tributo entrase en vigor», manifestó Grosske.