La Asociación de Construcción de la Petita i Mitjana Empresa d'Eivissa i Formentera rechaza de manera rotunda la nueva normativa decretada por el Ayuntamiento de Eivissa ante los cupos urbanísticos y augura un panorama muy negro en el sector: el precio de la vivienda se disparará y se reducirá hasta un 50 por ciento el empleo en el sector.

El presidente de la Asociación de Constructores, Pablo Arriba, incidió en la importancia del sector ya que 23 oficios dependen del mismo y aseguró que «la economía que se crea con la construcción en Eivissa es la que da la vida todo el año y el turismo es muy puntual. Indicó, además, que esta economía afecta al comercio con lo que «puede provocar muchos puestos de trabajo perdidos». Los constructores lamentaron «la absoluta falta de diálogo e información» al sector ya que asegura que no se ha contado con ellos para esta decisión municipal. El colectivo está de acuerdo en la necesidad de que haya una regulación al crecimiento «pero que no se haga tan bruscamente y con cupos anuales con la obligación de acabar el trabajo en un fecha determinada», precisó el vicepresidente de la Asociación, Juan Tur Ripoll. A su juicio, se ha de hacer de una manera consensuada. Los constructores opinan que este sector necesita de un periodo de adaptación a nuevas normativas.

Los constructores opinan que al pasar de 500 viviendas anuales a 160 supondrá que «falten viviendas y se dispare el precio». El vicepresidente señaló, además, que este sistema de cupos se ha impuesto «en plan dictatorial».

Las críticas de los promotores no sólo se centraron en el Ayuntamiento de Eivissa sino que también se refirió a otras instituciones. «Estamos viendo una forma de legislar, por parte del Ayuntamiento y el Consell, a base de decretos sin consensuar con ningún tipo de sector ninguna norma. Estamos en desacuerdo cómo se hacen esos cambios».