Más de la mitad de las licencias para edificar viviendas plurifamiliares (pisos) nuevas concedidas por el Ayuntamiento de Eivissa desde 1995 hasta 2001 tienen cinco o más plantas y una cuarta parte (26 por ciento) tienen siete. En total, en estos siete años se han entregado 122 licencias para la construcción de pisos, nueve de ellas para viviendas de protección oficial, lo que supone un total de 3.571 viviendas (10.713 plazas) y una superficie edificada de 536.837 metros cuadrados.

Els Verds critica, entre otras muchas cosas, que el nuevo sistema de cupos aprobado inicialmente el viernes por el Ayuntamiento no discrimina positivamente la edificación de altura media (hasta cuatro plantas) sobre las de gran altura (más de cuatro), que son la mayoría desde hace seis años. Por el momento, esta es una de las trece alegaciones que los ecologistas presentarán en el Conssitorio de Eivissa en contra de la nueva normativa. De 1995 a 2001, según el Informe sobre la evolución de las licencias de obra mayor, realizado por el Gabinete de Analisis Ambiental y Territorial (GAAT), de Palma de Mallorca, de las 112 licencias de pisos, 32 (26 por ciento) tienen siete plantas; 17, seis; 15, cinco: 13, cuatro; 31, tres y 14, dos. En el caso de las edificaciones de protección oficial, predominan las de tres plantas (seis). Luego hay dos de siete plantas y una de seis.

Todas estas nuevas obras se concentran, según el documento del GATT, en las zonas con mayor capacidad de desarrollo de acuerdo con el Plan General de Ordenación Urbana (PGOU): el ensanche, ses Figueretes (núcleos urbanos consolidados) y las áreas urbanas que crecen alrededor de las rondas (cas Serres, P-28, S-5, sa Marina, Illa Plana y Talamanca).

El GATT destaca, asimismo, la concentración de licencias en algunos lugares singulares y pequeños como sa Marina, Illa Plana y Talamanca.